- 01/03/2010 01:00
ONU: Objetivos pendientes de una Cumbre
En septiembre del 2000 se celebró en Nueva York la Cumbre del Milenio de las Naciones Unidas (ONU), en donde 189 líderes mundiales acordaron ocho objetivos puntuales con sus metas medibles: 1— Erradicar la pobreza extrema; 2— Lograr la enseñaza primaria universal, 3— Promover la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer, 4— Reducir la mortandad infantil, 5— Mejorar la salud materna, 6— Combatir el VIH/SIDA, paludismo y otras enfermedades, 7— Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente y 8— Fomentar una alianza mundial para el desarrollo. El plazo acordado: año 2015.
Kofi Annan, entonces secretario general de la ONU puntualizó: “ creo que la misión de las Naciones Unidas en el siglo XXI, será definida por un nuevo y más profundo entendimiento sobre la santidad y dignidad de cada vida humana, independientemente de su raza o religión ”.
A 10 años de trabajo, el reporte del 2009 sobre el avance de las tareas concernientes a cumplir con los objetivos planteados, es un frío señalamiento de que, a pesar de los avances, las dificultades han intervenido en el deseo de atender la necesidad de las poblaciones vulnerables, ante todo en los países pobres y en vías de desarrollo. En ese mismo período, las arcas personales de un puñado de personas de la población mundial se han engrosado con sumas inimaginables de dinero, bien o mal habido, que ha podido muy bien servir para apoyar los esfuerzos señalados.
En términos generales, la ONU señala que los avances positivos en estos 10 años muestran que aquellas personas que vivían en pobreza extrema en las regiones en desarrollo representaban poco más de la cuarta parte de la población mundial en desarrollo en el 2005; esto es un avance significativo comparado a casi la mitad de esa misma población en 1990. Hubo logros significativos en el área de la educación. “ En el conjunto de países en desarrollo, la matrícula en la enseñanza primaria alcanzó el 88% en el 2007, un aumento, respecto al 83% registrado en el 2000. Además, gran parte de ese progreso se logró en las regiones que estaban más rezagadas. En el África subsahariana y Asia meridional, la matrícula aumentó en 15 puntos porcentuales y 11 puntos porcentuales respectivamente entre el 2000 y el 2007 ”.
Pese al crecimiento de la población mundial “ Las muertes de niños menores de cinco años disminuyó a un ritmo constante en todo el mundo ”, desde 12,6 millones en 1990 hasta unos 9 millones en el 2007. A pesar de esto las tasas de mortalidad infantil en el África subsahariana siguen siendo las más altas del mundo.
Encuestas han determinado que intervenciones puntuales, tales como: la distribución de mosquiteras tratadas con insecticida para reducir el número de víctimas del paludismo, una de las principales causas de mortalidad infantil y, los resultados de las inmunizaciones de “ segunda ronda ”, que están logrando avances impresionantes en la lucha contra el sarampión, podrían redundar en grandes avances para los niños de esta región en los próximos años.
Por el lado negativo, la crisis económica que golpeó a las economías mundiales a partir del tercer trimestre de 2008, afectaron significativamente el avance de los trabajos para alcanzar las metas en casi todos los renglones. El reporte teme que se hayan estancado “ importantes avances en la lucha contra la pobreza extrema ” alcanzados entre los años 1990 y 2005. “ Durante ese periodo, el número de personas que vivía con menos de 1,25 dólares al día disminuyó de 1.800 millones a 1.400 millones. En el 2009, se estima que entre 55 a 90 millones de personas más que lo previsto antes de la crisis estarán viviendo en condiciones de pobreza extrema ”.
No puedo en este espacio resumir debidamente los resultados de cada objetivo, por lo que quedará material de discusión para próximas entregas. Pero el informe del 2009 da cuenta de que los retos y las dificultades existentes a la hora de la formulación de estos objetivos y sus metas, aunados a los desafíos, amenazas, atrasos y problemas encontrados en el camino, prueban que el “ querer hacer ” y el “ poder hacer ” muchas veces son eslabones de dos cadenas diferentes, que con mucho o poco desempeño y muy resueltos a cumplir con lo propuesto, los 189 firmantes de los Objetivos del Milenio tratan de unir estas cadenas al eslabón principal: los sectores humanos más necesitados.
*Comunicador social.ernestoholder@gmail.com