-
Redacción La Estrella de Panamá
Las comarcas y sus excesos
Es tiempo de que se le deje bien claro a los dirigentes indígenas que Panamá es de todos los panameños
Cierto es que los Gobiernos, desde Ernesto Pérez Balladares hacia acá, han dado gran reconocimiento a nuestros pueblos originarios. Tanto es así, que, aparte de las provincias, se establecieron cinco comarcas. Lamentablemente, esta decisión ha traído como consecuencia que las dirigencias de estas comarcas crean que tienen potestad sobre esos territorios o, lo que es lo mismo, consideran que son un país dentro de Panamá. Nada más alejado de la verdad. Las comarcas son territorios de la República de Panamá y, así como sus habitantes pueden recorrer todo el territorio nacional, porque son panameños, también tienen derecho los no indígenas a recorrer las comarcas. El colmo del abuso de la dirigencia de Guna Yala es que ahora ‘rompe ' todo tipo de relación con el Gobierno de Panamá y exige la salida de instituciones como la AMP o Migración de ‘su territorio '. ¿¡Qué barbaridad es esta!? Panamá es un solo país. Se divide geográficamente en nueve provincias y cinco comarcas. Cada residente o poblador tiene derechos y deberes, y ningún chiricano le puede prohibir a un guna visitar Chiriquí; así como no puede estar prohibido que un bocatoreño ingrese a la comarca Ngabe Buglé. Mal puede estarse cobrando para ingresar a uno u otro territorio o exigir derechos, como si fuesen otro país. Es tiempo de que se le deje bien claro a los dirigentes indígenas que Panamá es de todos los panameños.
-
La llorona del 6 de febrero de 2023
-
Carrizo lanza campaña presidencial en Penonomé
-
Crispiano Adames: 'Aquí no hay nadie obligado ni amenazado'
-
La llorona del 5 de febrero de 2023
-
PRD: entre las críticas y apelaciones
-
Uno de cada cinco panameños tiene intención de dejar el país
-
Conoce el auto más osado de Geely: el Tugella
-
CAF construirá edificio sede en Panamá con una inversión de $88 millones
-
China protesta por “sobrerreacción” de EEUU al abatir el globo espía
-
Las mineras, el nuevo Odebrecht en Panamá