• 08/10/2022 00:00

Valuación actuarial del sistema panameño de pensiones

“El hecho de que el Programa IVM no sea una Dirección Ejecutiva Nacional, demuestra que no le están dando el lugar que le corresponde, [...]”

El trabajo realizado por la OIT, referente a las pensiones, podríamos decir que es descriptivo, con algún nivel de explicación, pero no llega a la categoría de predictivo, porque no describe escenarios, donde podamos observar cuál sería el destino de las pensiones, si optamos por un modelo determinado, que, a manera de hipótesis, se hubieran planteado, para que nosotros podamos seleccionar la mejor que se contextualiza a nuestra realidad.

El estudio nos dice que es una proyección actuarial con los mismos parámetros del modelo actual, lo cual ellos llaman el “escenario base”, en el cual no aportan información adicional a la que ya conocíamos, que el Sistema de Beneficio Definido solo podrá otorgar pensiones hasta el año 2023 y que el año 2024, se agotarían las reservas de un modelo que viene siendo deficitario desde hace varios años. De igual forma, señala que en el Sistema Mixto, lo que corresponde al componente solidario, hasta el monto de B/. 500.00, también se agotarán las reservas para asumir esa responsabilidad, ya que el monto del otro componente de las pensiones corresponde a los aportes del asegurado a su cuenta personal, sobre el excedente de los B/. 500.00, de manera que concluyen que ambos sistemas serán críticos, si no se adoptan medidas para garantizar el pago de las pensiones.

Como el tema del Programa de Invalidez, Vejez y Muerte debe evaluarse desde una visión sistémica, hace fuertes señalamientos a la gobernanza de la CSS, y nos dice que este es un punto crítico, independiente del modelo de seguridad social, su éxito depende de los valores culturales de la organización y que sus acciones deben estar dirigidas a lograr madurez organizacional, de manera que, de no resolverse este tema, los problemas serían recurrentes, lo cual coincide con nuestra posición, cuando hemos señalado que el principal problema de la CSS es la Gerencia.

El informe señala que, en las reformas del año 2005, no se pudo determinar a qué criterios de sostenibilidad financiera y económica en el corto, mediano y largo plazo sustentaba el modelo de pensiones, de manera que, si le agregamos las falencias estructurales de la CSS, era predecible la situación que estamos viviendo en estos momentos, y que, desde luego, no quisiéramos que se vuelvan a repetir.

La CSS tiene nueve direcciones ejecutivas nacionales, dos de ellas son operativas, seis son de auxiliar de apoyo y una de asesoría legal, “las cuales supervisan y coordinan el funcionamiento de las direcciones nacionales, direcciones (intermedias), departamentos y secciones”. Debemos preguntarnos cuáles son las direcciones que supervisan a las direcciones ejecutivas nacionales de Comunicaciones y de Asesoría Legal, cuando en el organigrama se observa que no tienen ninguna dependencia bajo su supervisión y nosotros agregamos, aunque son importantes, no son funciones sustantivas de la Seguridad Social. En Gerencia, decimos que estas direcciones no tienen piso, que es un tanto como decir que somos abuelos sin haber tenido hijos.

Contrario a la beligerancia que tienen estas dos direcciones ejecutivas nacionales, se menciona la poca visibilidad que tiene el Programa de Invalidez, Vejez y Muerte, que, en el periodo de 2009 al 2014, estuvo adscrito a la Dirección de Servicios y Prestaciones de Salud, del 2014 al 2019, en la Dirección de Administración y Finanzas y actualmente está adscrito a la Dirección Nacional de Planificación.

El hecho de que el Programa IVM no sea una Dirección Ejecutiva Nacional, demuestra que no le están dando el lugar que le corresponde, como una función sustantiva de la Seguridad Social. En Costa Rica, este programa es manejado por la Gerencia de Pensiones, que se homologa con las direcciones nacionales ejecutivas y las direcciones de Comunicaciones y Asesoría Legal, son unidades subalternas de la Gerencia Administrativa.

La OIT concluye diciéndonos que, a través de la Mesa del Diálogo, debemos encontrar la solución y que están dispuestos a acompañarnos en este proceso, pero debíamos saber los términos de referencia con que se solicitaron sus servicios, ya que las expectativas eran que nos presentaran alternativas de solución.

Especialista Actuarial en Seguridad Social.
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