El índice de Confianza del Consumidor Panameño (ICCP) se situó en 70 puntos en junio pasado, con una caída de 22 unidades respecto a enero de este año,...
- 23/12/2013 01:00
Histórica exhortación pontificia
Su Santidad, el papa Francisco, ha publicado a través de la Oficina de Prensa del Vaticano el Documento que contiene su primera Exhortación Apostólica ‘Evangelii Gaudium’ (‘La alegría del Evangelio’). Que constituye una profunda reflexión sobre la nueva dimensión o los nuevos rumbos de la Iglesia Católica. Este documento es el resultado del Sínodo de Obispos celebrado del 7 al 28 de octubre de 2013 y que había sido convocado por su antecesor el papa Benedicto XVI.
Definitivamente, al analizar la temática y los aspectos significativos de la referida exhortación papal, apreciamos que se trata de reorientar y ofrecer una nueva e histórica dimensión de la iglesia y el papa desea imprimirle una dinámica nueva y diferente. Se trata de profundizar su misión profética, evangélica, misionera.
La exhortación pontificia constituye una especie de ‘canción de protesta’ interpretada por un papa que sabe perfectamente que en el mundo actual existen formas de lo que llama ‘disparidad social’, el hombre y la sociedad dominada por el ‘fetichismo o la idolatría del dinero’ y la ‘dictadura de una economía sin rostro’, la ‘exasperación del consumo’ y un ‘consumo desenfrenado’. El papa denuncia un sistema social y económico injusto y deshumanizante.
Lo que hace Su Santidad, el papa Francisco, es ratificar la misión evangélica-social de la Iglesia Católica. En muestro País, cae como ‘anillo al dedo’ el pronunciamiento papal, porque nos invita a reflexionar seriamente sobre nuestra realidad social, económica y política. La sociedad panameña se ha dejado llevar por aquellas promesas ficticias de que seremos muy felices y gozaremos de un gran prestigio social, si tenemos más riqueza y poder político, y dejamos a un lado los principios fundamentales ‘motor de vida’, como lo son el amor al prójimo, la solidaridad humana y el compromiso con la ‘opción preferencial con los pobres’, conscientes de que cuando estamos más cerca de los pobres y necesitados, estaremos más cerca de Dios.
Sin duda alguna, la exhortación apostólica tendrá sus detractores en sectores conservadores tradicionalistas, porque se niegan a comprender que la vida ha cambiado, el mundo ha cambiado, y la Iglesia Católica lo que hace es dar un testimonio y un mensaje que constituye un nuevo ‘signo de nuestros tiempos’.
En estos tiempos de Adviento, tiempos de espera y vigilia ante la venida de Jesús, es momento propicio para reflexionar sobre el mensaje del santo padre. Igualmente, estamos en el umbral de un nuevo año. Un año electoral en el que se observa cómo el dinero se convierte en ‘pieza clave’, poco edificante, que intenta comprar la conciencia de los electores a base regalos y prebendas.
Sin embargo, el día de las elecciones, el elector entrará al recinto de votaciones, estará solo con su conciencia y tomará la decisión que el cerebro de ordene y su corazón le dicte y premiará a los que han contribuido a mejorar sus condiciones de vida y sancionará a los que se equivocaron al creer que el dinero puede comprar la voluntad política del ser humano.
EXPRESIDENTE DE CÁRITAS ARQUIDIOCESANA.