Locos, cuerdos y pensantes

Estamos viviendo una campaña política de poca altura, sin planteamientos lógicos y con estrategias publicitarias que demuestren la poca seriedad de los próximos gobernantes.

Los panameños y el mundo entero estamos viendo un “Circo Político” en Panamá. El pueblo desde la gradas citadinas aplauden al “Gran loco ”, cómico panameño, que al igual que  “Garrit”, cómico de Inglaterra, el público al aplaudirlo le decía “Eres el más grandioso y el cómico reía”.

El Diccionario de la Real Academia define: “ Loco (a): Que ha perdido la razón, de poco juicio, disparatado, imprudente, que funciona descontroladamente, etc.”.

El significado establece claramente que un ser humano en esas condiciones mentales no puede proceder, actuar, tomar decisiones y mucho menos gobernar un país o ser representante, en la Asamblea, Gobernación o Consejo Municipal, si él, como persona, no cuenta con cualidades correctas para asumir una responsabilidad de tal magnitud. Esto significa que está enfermo (la locura es una enfermedad). Quisiéramos conocer si Ricardo Martinelli Berrocal, candidato presidencial, dice estar loco para burlarse de los que están cuerdos o ¿usa ese epíteto para disfrazar su verdadera personalidad?

En cuanto a “ Cuerdo (a): Que está en su juicio, prudente, que reflexiona antes de determinar”. Esta definición refleja el estado de sus adversarios políticos. Presentándose ante los votantes con condiciones de sanidad mental, garantizarán que sus procedimientos administrativos serán cuidadosamente analizados, actuarán con prudencia y reflexionarán antes de tomar una decisión. Sus acciones se enmarcarán dentro de los parámetros establecidos constitucionalmente, con prudencia y redundarán en beneficio de todos los panameños y no accionarán con prepotencia, por capricho, por imposición o simplemente por tener el poder de decisión.

El otro grupo de ciudadanos, los llamados independientes , “hombres y mujeres”, que suman más que los que dicen estar locos y los cuerdos. Estos son pensantes , son los que piensan, imaginan, consideran o discurren, reflexionan y examinan con cuidado algo para formar un dictamen. Estas cualidades y condiciones personales son el “peso” inclinador de la balanza hacia un lado u otro. Cuentan con el poder de elegir, porque su voto lo harán a conciencia y no a favor de candidatos que manifiestan públicamente que están “locos” o su vida la han manejado antojadizamente, sin consulta, sin reflexión y sin sensatez.

Como diría: Juan Charrasqueado, yo soy el rey ; o lo que pensaría Cantinflas: “No, hombre, ¿cómo?, ¿pero se ha visto?, ¡no, no puede ser!, ¿qué será de nosotros si nos gobiernan los locos?, ¡imagínese usted, mi cuate!, ¿a dónde iremos a parar, esto será un país de locos, no le parece?”; y el pueblo se preguntaría “¿Quién podrá defendernos?”.. “¡Yo.. el Chapulín Colorado!”. Creo que el panameño no está dispuestos a llegar hasta ese punto.

Nuestra responsabilidad de ciudadanos es “votar” el tres de mayo y hacerlo con la cualidad de “Pensante”, no podemos “Votar en Blanco”, de hacerlo estaríamos apoyando a los candidatos que dicen estar “locos” y estamos seguros de que no queremos ser gobernados por dementes.

“Tú decides con tu voto” , o te sumas a los egresados del Matías...!

-El autor es historiógrafo y escritor.escritoramador@gmail.com