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Los diputados abrieron este miércoles la primera sesión bajo la nueva junta directiva de la Asamblea Nacional, en medio de expectativas e incredulidad sobre el comportamiento que tendrá este órgano del Estado. Fruto de un pacto entre los parlamentarios independientes y de partidos políticos, se abre una posibilidad de hacer cambios necesarios a lo interno del Legislativo que no pueden esperar. El primer gran desafío será entrar a discutir la Ley 462 de la Caja de Seguro Social, en la que la Asamblea podría jugar un rol componedor en una sociedad polarizada y un Ejecutivo que cerró las puertas al diálogo sobre ese tema. La realidad es que los diputados son los mismos que de la legislatura anterior, y eso no va a cambiar hasta que el pueblo vuelva a elegir a sus representados en 2029. Sin embargo, lo que sí cambia de manera acelerada es el estado de ánimo de la sociedad, cada vez más crispada y cansada de promesas incumplidas. La Asamblea Nacional puede ser el puente para canalizar ese descontento, por eso, lo que ocurra en esta legislatura será clave si queremos evitar una crisis social de mayor envergadura que a nadie beneficia.