Fortalecimiento de la familia...

Aunque, como dicen, ‘cada cabeza es un mundo' y ‘nadie aprende por cabeza ajena', haciendo alusión a ese libre albedrío que tenemos para tomar el camino que queramos, no deja de ser cierto que la forma como es educado un niño o niña en su casa es vital y enrumba a la mayoría de la gente por buenos senderos. Por ello, es importante para nuestra sociedad que se fortalezca su núcleo: la familia. De ella depende, en gran medida, que dejemos de lamentar el crecimiento acelerado de la corrupción por la falta de valores éticos, morales y cívicos. De igual forma, debemos exigir que desde los Gobiernos se deje de promover la pereza intelectual y que, por el contrario, se resalten y premien la excelencia, el esfuerzo que hacen tantos niños y jóvenes, AÚN SIN RECURSOS SUFICIENTES, para estudiar y que, pese a su humildad, no andan en pandillas ni en actividades contra la sociedad y ellos mismos. El relajamiento de los valores y ese desconocer la conciencia de país, son gran parte de los motivos de lo que estamos lamentando y criticándole hoy a una parte de nuestra juventud.