Salarios ante la realidad...

La lógica —y quizá más que la lógica, la justicia— indica que los salarios deberían ir de acuerdo a la preparación académica, la experiencia, responsabilidad del empleado, más otras cualidades que lo adornen. No obstante, no deja de ser justo también que se tomen en cuenta, al poner un determinado salario para una posición, los costos de una vida con calidad. Recién se instaló la Comisión del Salario Mínimo y pronto se instalará también ‘el tira y jala' entre representantes de los trabajadores y los patronos por un nuevo salario mínimo, como establece la Ley. Pero, las condiciones para que lo que se acuerde vaya con la realidad socioeconómica actual —con, por ej., una canasta básica que no debe contemplar solo comida— no dependen solo de la ‘buena voluntad' de las partes, sino de que existan las condiciones económicas en el sector empresarial y allí, según los patronos, está el problema. No se vislumbra un trabajo fácil para la Comisión del Salario Mínimo y la esperanza de mejores días para los trabajadores se empaña, aún más. Ojalá imperen la buena fe y el diálogo.