Participación ciudadana...

Si bien contamos con instituciones responsables de la limpieza de las áreas públicas, la ciudadanía debe tomar un rol más activo en cuanto a la correcta disposición de la basura generada por ella misma y la limpieza. Es usual ver en la TV, p. ej., a la gente de diferentes comunidades quejándose de un parque sucio, de basura por aquí y por allá, pero nunca o casi nunca se ven ciudadanos organizados limpiando lo que ensuciaron o dañaron personas que quizá sean de la misma comunidad que sale quejándose por ‘el monte ', el parque lleno de basura, un tronco que obstruye un desagüe... No todo es queja, y los medios de comunicación no deben buscar solo a la gente que se queja por situaciones que un poco de responsabilidad, cooperación, solidaridad, puede solucionar o mitigar mientras llegan las autoridades, si se tratase de situaciones complejas. Hay una subcultura de ‘a mí no me toca ', basada en que ‘ya vendrá ‘alguien' que lo recoja, lo ponga, lo quite, lo limpie... '. Podemos comenzar por no ensuciar —ni dañar—, que ya es bastante, pero si podemos limpiarlo, ¿por qué no hacerlo?