La Tusa

Cierto es que la economía panameña pasa por un buen momento. Que los megaproyectos como la ampliación del Canal, el Metro, los nuevos aeropuertos y la reorganización vial, entre otros, son un dínamo para la economía nacional. Pero también es cierto que descuidar lo micro es una irresponsabilidad soberana. La sociedad panameña está de acuerdo con estas grandes obras, pero también resiente que otros megaproyetos se lleven a cabo sí porque sí, sin tener el consentimiento de todos. El de la Torre Financiera, popularmente conocida como La Tusa, es uno de estos casos. El 82 por ciento de los encuestados por Dichter & Neira manifestó su oposición a la construcción de esta megaobra, pues contrasta con problemas tan elementales como la falta de agua en las comunidades. Sabemos que el gobierno evalúa la no construcción de este proyecto, lo que da un respiro y tranquiliza a la población, porque se interpreta que el presidente Martinelli empieza a entender que es preferible escuchar a la gente antes que imponer sus decisiones. ¡En hora buena!