El ejemplo de Sócrates

Sócrates Oliveira apodado el filósofo del futbol. Capitán del Scratch du Oro en los campeonatos mundiales de 1982 y 1986, un ejemplar mediocampista que brilló con el Corinthians en Brasil y con el Fiorentina en Italia. Estratega sobre la cancha, médico de profesión y estrella del equipo brasileño, falleció ayer víctima de un rival al que no pudo vencer. Por su nombre y su estilo de jugar, recibió el apodo que lo inmortalizó, pero paradójicamente su muerte refleja poca reflexión ante la abrumadora fuerza de la fama. El caso de Sócrates proyecta la vulnerabilidad de que adolecen muchos atletas cuando en un momento alcanzan la cima de su carrera. Justo ahí en el sitio culminante, sucumben ante los excesos y por la sensación de omnipotencia. Sócrates, en ese punto, se entregó al alcohol, Diego Maradona, en su momento lo hizo con la droga, afortunadamente logró recuperarse. Pero muchos otros caminan esa senda. Ojalá el final del astro brasileño sea también parte de su legados, un espejo para que jóvenes deportistas, copien su reflexión en la cancha y eviten sus malos pasos.