Soy PRD

En la antigua Grecia, cuna de la democracia, el gran Pericles en su oración fúnebre manifestó: ‘No es hombre pacífico, sino inútil el que no participa en el Gobierno de su ciudad '. También fueron los antiguos griegos quienes crearon la palabra ‘idiota ', convirtiéndola en un sinónimo de aquel ciudadano que no participaba de la vida política de su ciudad.

Hoy, en nuestro país, como en el resto de América Latina, las cúpulas de poderes fácticos, critican y desprestigian a la clase política, se han organizado y camuflado a través de clubes, cámaras, comités, fundaciones, y medios de comunicación, entre otros mal llamados ‘Sociedad Civil ', etc., para influir y actuar en la política gubernamental directa e indirectamente, en la opinión pública y en la economía, y este último, que es en realidad lo que más les importa. Y ya han logrado también penetrar las entrañas mismas de los partidos políticos, lo cual es muy grave.

Es por eso que debo exhortar a todos los ciudadanos a que se hagan partícipe de la vida política de nuestro país, y esa incorporación debe darse a través de los canales apropiados e institucionalizados que son nuestros partidos políticos, sin importar en cuál, siempre que este coincida con sus ideales y no por coyuntura electoral o clientelismo.

Créanme que comparto los preceptos de los antiguos griegos, es por eso, y por muchas razones más, que soy miembro del más grande e importante partido político que haya conocido nuestra nación, soy miembro del Partido Revolucionario Democrático, el partido del general Omar Torrijos Herrera; de Gerardo Gonzales, de Rómulo Escobar, de Ascanio Villalaz, entre muchas otras lumbreras que ha dado nuestra nación, y lo seguiré siendo hasta que Dios me lo permita.

Soy un afiliado militante y leal, preocupado y responsable de mis acciones en beneficio de nuestra membrecía, incluso más de una vez he hecho valer mi derecho a disentir que tanto nos enseñó Omar, defendiendo nuestra democracia interna y atacando siempre las actitudes retrogradas, sujetas a la opinión de una sola persona, de elites o subordinados a un pequeño grupo. Omar decía: ‘Cuando los que mandan pierden la razón, los que obedecen pierden el respeto '.

En la actualidad a nuestro partido y gracias a la tozudez de una dirección política fallida y derrotada, nos corroe la impureza, el clientelismo, la negligencia, la incuria, el fanatismo, los rencores y el individualismo exacerbado.

Debemos salvar el TORRIJISMO, sus métodos, metas e ideales y debemos reestructurar el CEN y todas las instancias políticas de nuestro partido, camino al Congreso Nacional Ordinario de octubre próximo.

Para este fin, debo manifestarles que soy parte de un equipo que creemos en la conducción de Pedro Miguel González, el cual es: un gran compañero, un brillante profesional, dirigente, líder y estratega político, un gran orador, un estadista, de entre los mejores que haya producido mi generación. Lidera nuestro movimiento de renovación y rescate Torrijista, y junto a él, un gran equipo, que pretendemos fortificar a nuestro partido, unir lo que la actual dirigencia ha desunido, haciendo de nuestras débiles y enfermizas estructuras, estructuras imponentes y provechosas, para realizar todas las acciones que busquen el fortalecimiento, la unidad, el rescate y la renovación de nuestro partido.

Haciendo que nuestro ideal bienhechor logre alcanzar el máximo de entendimiento en nuestras bases militantes y la población en general. Teniendo en cuenta una vez más que: ‘Las ideas, aunque sean buenas, no se imponen ni por la fuerza de las armas ni por la fuerza del genio. Hay que esperar que estas hayan penetrado en la muchedumbre '.

Hagamos entonces que el ideario de Omar penetre entre la muchedumbre y en las entrañas de nuestro pueblo, repudiemos los totalitarismos. No importa la latitud de donde los mismos provengan, y coincidiendo plenamente con el gran Pericles, cuando nos dice que: ‘El ciudadano que no participa adecuadamente en la actividad de gobernar, o de gobernarse y de buscar el bien común, no está cumpliendo con su obligación hacia su prójimo, y especialmente con su familia '.

He luchado toda mi vida por esto y seguiré hasta ver a mi glorioso partido más revolucionario que nunca y, por supuesto, más democrático; lo veré engrandecerse y le contribuiré intelectual y materialmente, consciente en libertad a mi patria y a Dios.

*MIEMBRO DEL PRD, EXPRESIDENTE DEL PARLACEN.