Panamá y Nicaragua están al borde de un conflicto migratorio

Panamá y Nicaragua están al borde de un conflicto migratorio debido a unas medidas rigurosas implementadas por el Gobierno del presidente Ricardo Martinelli y que son fuertemente cuestionadas por los nicaragüenses y por el Gobierno nica de Daniel Ortega.

¿Cómo comenzó todo?

El pasado miércoles 26 de enero, Panamá informó que adoptó medidas migratorias en la frontera de Panamá con Costa Rica ante el creciente número de ciudadanos nicaragüenses que entran al territorio panameño en excursiones y luego "se quedan de manera ilegal".

El Servicio Nacional de Migración (SNM) dijo a La Estrella Online que resulta muy costoso para el Gobierno la alimentación, hospedaje y pasaje aéreo del traslado de Panamá a suelo nicaragüense de los ciudadanos que se quedan.

"La deportación no puede ser por vía terrestre por los controles migratorios establecidos por el Gobierno de Costa Rica", indicó Didacio Camargo, vocero del SNM.

La entidad alega que se les da 6 meses legales, pero luego se quedan trabajando se deportan acarreando gastos al Estado panameño.

Mediante un comunicado, Migración, por primera vez en años, les pidió a los nicaragüenses que pretenden viajar vía terrestre hacia Panamá, en vehículos y autobuses, por más de 30 días, boletos de regreso vía aérea.

Los nicaragüenses que ingresan a Panamá a través de carreteras deben disponer, además, de una visa de tránsito válida por 30 días, conferida por el consulado de Costa Rica en Managua.

Costos

Panamá para implementar las medidas rigurosas contra Nicaragua presentó cifras. Solo en el mes de enero de 2011 gastó 3 mil 197 dólares con 70 centavos en la deportación de nueve ciudadanos nicaragüenses, según el Servicio Nacional de Migración.

Igualmente, dicen que más de 100 nicaragüenses no pudieron ingresar a Panamá por el puesto fronterizo de Paso Canoas por no contar con sus documentos en regla.

La entidad comunica que en el año pasado se invirtió 443 mil 292 dólares con 88 centavos en la deportación de 752 extranjeros, en su mayoría nicaragüenses.

En los últimos 16 meses entraron 32 mil nicaragüenses de los cuales 6 mil se quedaron en suelo panameño.

Reacciones

Hoy, lunes, diputados de la Asamblea Nacional de Nicaragua exigieron al presidente nicaragüense, Daniel Ortega, y al canciller Samuel Santos la aplicación de medidas restrictivas de entrada y salida a los migrantes panameños en Nicaragua.

El diputado Francisco Aguirre consideró que Nicaragua debe darle a los migrantes panameños "la misma medicina" que le están aplicando en Panamá a los nicaragüenses.

De acuerdo al periódico El Nuevo Diario, la Comisión de Población Desarrollo y Municipios de la Asamblea envió una carta al Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua para que responda y aplique medidas recíprocas migratorias a Panamá como una forma de reclamar en lenguaje diplomático.

El presidente de la comisión, el diputado Agustín Jarquín Anaya, expresó que Panamá viola los acuerdos del sistema de integración, por lo que se tomarán medidas también en Nicaragua.

Paralelamente, el gobierno de Nicaragua lamentó hoy el endurecimiento de los controles migratorios y en voz del vicepresidente de la República, Jaime Morales, apuntó a la normalidad de la situación.

"Confío más bien en que estas cuestiones se normalicen para evitar se sigan dando más maltratos a todos los seres humanos y no sólo a los nicaragüenses, con esos controles migratorios", argumentó.

En tanto, Jacinto Suárez, vicepresidente del Parlamento Centroamericano (Parlacen), al que Panamá se salió en noviembre pasado, ha denunciado en dos ocasiones la arbitrariedad de las autoridades migratorias de Panamá de exigir boleto aéreo aunque se entre por vía terrestre .

El organismo centroamericano investiga ya las medidas adoptadas por Panamá y los resultados de la pesquisa, para dar a conocer el caso documentado a finales de febrero.

Suárez, jefe de Relaciones Internacionales del gobernante Frente Sandinista de Nicaragua, no descartó una demanda contra el presidente Martinelli.

La Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua demandó a la Cancillería de ese país intervenir en el caso que puede afectar esa actividad en la región.

Quejas

Turistas y pequeños comerciantes que realizan compras en Panamá criticaron la disposición y exigieron que sea revisada para permitir el libre tránsito de pasajeros.

El pasado 31 de enero, el diario La Prensa, de Nicaragua, publicó una nota referente a las molestias de los ciudadanos y defensores de derechos humanos, que entraron a cuestionar las medidas del Gobierno de Panamá.

Nicaragüenses que viajan hacia Panamá por productos y que el domingo 30 de enero partieron por vía terrestre se mostraron sorprendidos por el endurecimiento de los controles migratorios.

Bajo el título: "Nicaragüenses más indefensos en el exterior", el periódico nica expone opiniones como la de Roberto Petray, miembro de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH), quien deplora que en el caso de Panamá "es una violación flagrante al ciudadano".

Asimismo, el pasado viernes 4 de febrero, nuevamente el diario nica publica una nota con el título "Panamá: deportar nicas es muy caro" donde, entre otras cosas, destacaban que la aerolínea panameña COPA Airlines aplica restricciones migratorias desde el aeropuerto internacional de Managua.

"Aparentemente, los funcionarios de la aerolínea COPA no dejan subir a los aviones con destino a Panamá a los nicaragüenses que no lleven su boleto aéreo de regreso", dice atendiendo a una queja de un ciudadano.

La presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH), Vilma Núñez, consideró que las disposiciones migratorias de Panamá como "un compadrazgo" entre los gobiernos de Panamá y Costa Rica, una alianza política.

Francisco Aguirre Sacasa, excanciller de Nicaragua, dijo que obviamente existe una alianza entre Costa Rica y Panamá para doblegar a Nicaragua en el tema del río San Juan.

Recordó que una de las normas básicas de las relaciones internacionales "es tratar a los países como a uno lo tratan", por lo que se debe pedir a los panameños lo mismo que piden a los connacionales.

El diputado nicaragüense Eliseo Núñez Hernández, del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), propuso la aplicación de un arancel de 20 dólares que deben pagar las unidades de transporte terrestre de carga de más de 8 toneladas de capacidad por eje que provengan de Costa Rica y Panamá.

Ese arancel fue aprobado en octubre de 2010 en la reforma a la Ley Creadora del Fondo de Mantenimiento Vial (Fomav) y publicado en gaceta de ese país, pero no se ha hecho efectivo por la oposición de la Asociación de Transportistas de Nicaragua.

Para no dejar dudas

Este medio se comunicó con la Cancillería de Panamá para conocer si existe alguna queja formal del Gobierno de Nicaragua e informaron que no se ha emitido ningún documento al respecto.

De acuerdo con los datos oficiales del Centro de Exportaciones de Nicaragua, durante el 2010 las exportaciones del país hacia Panamá sumaron los 11.4 millones de dólares, lo que significó un incremento del 1.86 por ciento.

El Gobierno panameño para despejar las dudas dice que "mantiene sus puertas abiertas a todos los extranjeros que desean hacer turismo en el país, residir e invertir", sin embargo, los controles migratorios se realizan para evitar incurrir en gastos de deportaciones de ciudadanos sin estatus migratorio, ya que estos fondos pueden ser utilizados para obras sociales.

Panamá y Nicaragua establecieron relaciones diplomáticas el 13 de diciembre de 1938.