Pedagogía reflexiva de la docencia universitaria

Actualizado
  • 21/03/2019 01:00
Creado
  • 21/03/2019 01:00
Se concibe a las instituciones de educación superior como entidades asociadas al progreso y a la transmisión del saber

Hoy en día, la educación superior debe enfrentar retos particularmente difíciles como el de formar profesionales capaces de generar y conducir los cambios de la sociedad, además de incidir de manera cada vez más decidida, permanente y eficaz, en sus ámbitos. Todo ello trae consigo un amplio debate sobre el futuro de la educación superior y genera propuestas que marcan una visión distinta.

Se concibe a las instituciones de educación superior como entidades asociadas al progreso y a la transmisión del saber; sin embargo, en las últimas décadas cada vez es más frecuente la desarticulación entre las necesidades del mercado de trabajo y la formación que ofrecen las instituciones, lo cual se traduce en largas filas de desempleados o bien en que el tiempo que transcurre entre el egreso y la inserción de los sujetos en las fuentes de trabajo es cada vez más prolongado. Todo esto hace necesaria una revisión profunda de los sistemas educativos para buscar alternativas que respondan a las demandas del mundo globalizado en que estamos viviendo.

Las competencias de los docentes universitarios:

La competencia profesional del docente, entendida más como una competencia intelectual, trasciende el sentido puramente técnico del recurso didáctico. Las competencias docentes se caracterizan por ser complejas: combinan habilidades, principios y conciencia del sentido y de las consecuencias de las prácticas pedagógicas; así como una reflexión y análisis sobre los contextos que las condicionan y que van más allá del aula. La competencia profesional ‘…se refiere no sólo al capital de conocimientos disponibles, sino a los recursos intelectuales de que dispone con objeto de hacer posible la ampliación y desarrollo de ese conocimiento profesional, su flexibilidad y profundidad' (Contreras, 1999: 58).

La docencia universitaria aparece así ligada a un conjunto de competencias didácticas en cuya génesis juegan un importante papel el conocimiento teórico-práctico y la actividad reflexiva sobre la práctica. Perrenoud (2007) señala que el concepto de competencia representa la capacidad de movilizar varios recursos cognitivos para saber hacer frente a un determinado tipo de situaciones. Las competencias no son en sí mismas conocimientos, habilidades o actitudes, aunque movilizan tales recursos; dicha movilización es única, es decir, situada en contextos específicos. El desarrollo de la competencia pasa ‘por operaciones mentales complejas, sostenidas por esquemas de pensamiento' (Perrenoud, 2007: 11) y finalmente las competencias profesionales se crean en el proceso de formación tanto como en los escenarios de trabajo.

Como experiencia de reflexión planificamos desde un principio con nuestros estudiantes a través de la reflexión los siguientes postulados: ¿Cómo enseñan los docentes en la Universidades actualmente? ¿Cómo deberían enseñar los docentes universitarios para alcanzar que los estudiantes logren desarrollar competencias específicas y profesionales en su desempeño profesional? ¿Qué tipo de técnicas y estrategias didácticas debemos aprender a desarrollar con los estudiantes a fin de que los se apropien de la construcción de su propio conocimiento?

De ahí que planificamos videos de cómo los docentes exitosos hacen en sus aulas de clases a partir de altas expectativas que esperan de sus estudiantes. Posteriormente, trabajamos talleres con técnicas como mentefacto, mesa redonda, investigaciones, debates, foros entre otros y los métodos que permiten a los estudiantes trabajar actividades de aprendizajes que le permitan visualizar logros de desempeños similares a los de los contextos reales o auténticos.

No voy a señalar que es fácil, pero sí podemos señalar que no es imposible trabajar con estudiantes que desean ser docentes universitarios en el futuro y, sobre todo, la Pedagogía Reflexiva, que nos permite profundizar la enseñanza del pensamiento reflexivo en las aulas de clases.

Los estudiantes perciben la actitud del profesorado: los alumnos perciben que el profesor espera algo de ellos. El profesor es cercano a la juventud, da mucha importancia a su relación con los alumnos; el profesor es accesible a los alumnos, busca la buena relación y sintonía. El profesor es entusiasta, disfruta dando clases, tiene mucho interés. El profesor trabaja con ellos en las clases. Tiene una actitud honrada, responsable.

Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones