‘Ascensos vienen de arriba’, Gordón

PANAMÁ. En la víspera de los ascensos a dos altos oficiales del Servicio Aéreo Naval (SENAN), presuntamente como recompensa por el manejo que se le dio al trágico caso SAN-100, el escozor se ha apoderado de otros miembros de altos rangos en la institución.

Una fuente de entero crédito, que pidió la reserva de su nombre, aseguró a La Estrella que el director del SENAN, Rigoberto Gordón, gestionó la promoción de los subcomisionados Alberto Jaén y Alexis Camarena, a comisionados por encima del reglamento interno y la ley del SENAN.

Según el informante, el 12 de agosto de 2008 mediante el Resuelto de Personal 082, Jaén y Camarena fueron ascendidos del rango de mayor a subcomisionados, y con sueldos de 1,500 dólares cada uno, más un sobresueldo de 244 dólares y gastos de representación mensuales por 400 dólares.

Pero ahora, destaca la fuente, a menos de un año (10 meses) de aquel ascenso está apunto de salir otra resolución que elevará a ambas unidades a comisionados, cuando la norma establece que debe esperarse cuatro años para otra promoción.

La fuente aseguró que todo esto responde “únicamente” al favoritismo que Gordón tiene por ellos, y en agradecimiento por el manejo que se le dio a los informes sobre el accidente del helicóptero SAN-100, en mayo del 2008, incluido los preparativos de aquel último vuelo de “El Viejo”.

Y el descontento interno en el SENAN no termina allí. Otro informante envió a La Estrella un correo electrónico acusando a Gordón de “mover sus influencias” para favorecer a su hijo, Rigoberto Gordón Jr., con una beca de estudios en Brasil, así como su nombramiento como cadete con salario de 390 dólares mensuales.

“Los otros cadetes tienen que ingeniárselas para sobrevivir en sus academias, pero Gordón se encargó de que su hijo estuviera bien amparado”, señaló el denunciante.

En su despacho y con documentos y expedientes en mano, Rigoberto Gordón respondió a ambas denuncias. Señaló que el ascenso de Jaén y Camarena viene del Despacho Superior (ministro de Gobierno y Justicia), atendiendo un pedido de los propios oficiales al presidente Martín Torrijos.

Gordón explicó que los dos se jubilarán entre septiembre y octubre de este año, razón por la que se accedió a la petición de ascenso que éstos hicieron. “De manera excepcional”, aclaró Gordón, pues negó que los ascensos de agosto pasado tuvieran vínculos con el caso SAN-100. Esos trámites, sostuvo, “se iniciaron en febrero de 2008, es decir, tres meses antes del accidente”.

En cuanto a su hijo, explicó que hay 72 jóvenes pertenecientes al SENAN, que también estudian en el exterior, y que cada uno de ellos tiene un nombramiento como cadete con salario de 390 dólares.

“Es un apoyo para sus estudios”, recalcó. “En el 2007, cuando mi hijo inicia estudios, yo no era el director del SENAN”, añadió.

Según Gordón todo es parte de una campaña en su contra desde lo interno de la institución, porque hay quienes quieren desprestigiarlo. “Soy una piedra en sus zapatos”, puntualizó.