Hicimos lo que había que hacer

PANAMÁ. El ministro de Educación, Salvador Rodríguez, justificó el atraso en el anuncio del calendario escolar, aduciendo que la situación se debió a que se tenía que cumplir con dos grandes metas.

De acuerdo con Rodríguez se había establecido que para poder iniciar las clases, el 95% de los centros educativos a nivel nacional debían estar reparados y equipados, además que el 98% de los docentes estuvieran contratados y pudieran recibir sus salarios la primera quincena.

Contrario a lo que afirman los docentes de que con el nuevo calendario escolar los estudiantes pierden más de un mes de clases, el ministro asegura que solo hay una semana menos de clases.

A la pregunta de si esta situación podría afectar el rendimiento académico de los estudiantes, Rodríguez respondió que para que eso no suceda solicita a los estudiantes y a los docentes tratar de minimizar las actividades que conllevan la interrupción de las clases.

Dijo que el Ministerio de Educación ha realizado un esfuerzo enorme para tener a las escuelas en su gran mayoría reparadas, equipadas y los docentes nombrados.

“El ministerio por su parte ha hecho lo que tenía que hacer, ahora los docentes tienen que entregarse a su labor de docente, dar clases y los estudiantes tienen que hacer lo propio y estudiar”, destacó Rodríguez.

Agregó que aunque se han realizado los esfuerzos para que todas las escuelas estén listas al inicio del año escolar las nuevas construcciones no estarán terminadas antes del inicio de las clases.