Panamá busca modernizar la recolección de basura con contrato de $140 millones

PanamaCompra publicó esta semana los detalles de una nueva licitación para contratar servicios de recolección, transporte y disposición final de residuos sólidos en el distrito capital. El contrato, con un valor referencial de B/.140,356,287,00 y una duración de siete años, representa uno de los esfuerzos más ambiciosos en los últimos tiempos para enfrentar la crisis de la basura en la ciudad.

El plan se divide en tres renglones, que abarcan distintas zonas del distrito de Panamá. El Renglón 1 incluye los corregimientos de Betania, Pueblo Nuevo, San Francisco, Río Abajo, Parque Lefevre y Don Bosco. Allí se exige una flota con 15 camiones compactadores, volquetes, retroexcavadoras, minicargadores y otros equipos especializados.

El Renglón 2, destinado a la zona norte (Chilibre, Alcalde Díaz, Las Cumbres, Ernesto Córdoba y Caimitillo), deberá ajustarse a un volumen de más de 240 toneladas diarias.

Por su parte, el Renglón 3, que comprende el área este (Juan Díaz, Tocumen, Pacora y 24 de diciembre), deberá gestionar más de 460 toneladas diarias, siendo la zona de mayor generación de desechos.

Cada renglón deberá gestionar unas 787.000 toneladas durante el periodo contractual. A un precio de B/.57.00 por tonelada sin Itbms, la inversión proyectada supera los B/.48 millones por renglón, con la posibilidad de que el contrato total rebase los B/.140 millones.

La licitación exige que los proponentes cuenten con oficinas operativas en el distrito, software especializado, GPS, trazabilidad con códigos QR, entrega de contenedores y personal calificado. Además, deberán renovar progresivamente el 30 % de la flota vehicular cada año. Las propuestas serán evaluadas por renglón según criterios técnicos, financieros y económicos.

El presidente José Raúl Mulino, durante su conferencia semanal del 19 de junio, celebró la apertura del proceso: “Representa un paso decisivo hacia una gestión más moderna, eficiente y sostenible de nuestros residuos. Esperamos que sea pública, transparente y que pueda contar con la participación de las mejores empresas internacionales del sector y que por fin se dé una solución definitiva y a largo plazo”, expresó.

Pero no todos reciben la noticia con entusiasmo. La Estrella de Panamá conversó con el exalcalde capitalino José Blandón (2009–2014), quien cuestionó la falta de voluntad política que ha arrastrado el problema durante más de dos décadas. “La problemática de la basura en el distrito de Panamá debería manejarse a través de la Alcaldía y no por la AAUD”, sostuvo.

Blandón recordó el ambicioso Plan Maestro elaborado por la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) entre 2001 y 2003, que proponía modernizar el sistema de residuos antes de 2015. El estudio diagnosticó que el distrito generaba entonces más de 1.000 toneladas diarias de basura, y que el 80 % llegaba a un cerro Patacón ya colapsado, sin cobertura adecuada ni control. El plan estimaba una inversión de $148 millones y sugería crear una empresa municipal técnica, mejorar tarifas, establecer estaciones de transferencia y cobrar por tonelada recolectada.

“Nada de eso se implementó”, afirmó Blandón.

Hasta aquel entonces, la problemática de los residuos en el distrito se manejaba a través de la Dirección Municipal de Aseo Urbano y Domiciliario (Dimaud). Sin embargo, durante el gobierno del expresidente Ricardo Martinelli (2009- 2014) se creó la Autoridad de Aseo Urbano y Domiciliario (AAUD) con el objetivo de centralizar y modernizar la gestión de los residuos sólidos en la ciudad de Panamá, ante el evidente colapso y deficiencia del sistema municipal de aseo que era administrado por la institución anterior.

”Realmente, no hubo mucha diferencia entre la Dimaud y la AAUD, porque el modelo de recolección no cambió debido al gran incentivo para mantenerlo ineficiente hasta la actualidad”, aseguró.

En su gestión, el exalcalde propuso concesionar la recolección en tres zonas —norte, este y centro— con centros de transferencia y pagos de B/.45 por tonelada, muy por debajo de los B/.100 que, asegura, se pagaban entonces. “El sistema actual es ineficiente. En Panamá se cobra por hora trabajada, no por tonelada gestionada. Así no se puede avanzar”, afirmó.

También criticó que todo el equipo sea alquilado y que no exista ninguna planta de tratamiento de residuos en el país. “Cerro Patacón no es un relleno sanitario, es un vertedero a cielo abierto. El tema de la disposición de basura en Panamá es una vergüenza nacional”, sentenció.

Finalmente, advirtió sobre las limitaciones logísticas de los camiones para acceder a barrios complejos. “En otras ciudades del mundo se usan recolectores más pequeños que luego descargan en camiones grandes. Aquí no hay planificación ni adaptación”, concluyó.

La licitación avanza, pero el reto sigue siendo más profundo: lograr que, por primera vez, se pase del papel a la acción.