Balbina en un apaga fuego

PANAMÁ. Hace dos semanas una información divulgada por el programa Mega TV (internet), que dirige la periodista María Elvira Salazar y el ex capitán de navío venezolano Bernardo Jurado, encendió la opinión pública: el supuesto financiamiento de la campaña de Balbina Herrera por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez.

De acuerdo con la información, Chávez entregaba los fondos a la candidata a través de la empresa FEXTUN (fábrica de exquisiteces de atún), la que tuvo que salir rápidamente a desligarse de ambas figuras.

La presunta relación entre Herrera y Chávez puso en corredera a la campaña del Partido Revolucionario Democrático, que tuvo que enviar a sus apaga fuegos para bajar la temperatura del tema, que había vuelto aparecer.

A la semana siguiente, no había salido el asunto de la comidilla política, cuando estalló otra bomba incendiaria: “El muerto oculto de Daniel Delgado Diamante”, una situación que provocó la rápida acción del gobierno de Martín Torrijos y la campaña balbinista, que obligó al ministro a separarse del cargo, sin sueldo, por un mes.

En el PRD, a vox populi, todos hablan de que DDD no volverá a Gobierno y Justicia.

Ayer le tocó a la bancada oficialista, que fue llamada al Palacio de las Garzas para participar de una reunión de más de una hora y media, para recibir un jalón de orejas. Y es que fuentes internas del PRD confirmaron a La Estrella que no todos los diputados perredistas están cuadrados con la candidata “de corazón”.

Se habla incluso de que sus copartidarios del legislativo hacen campaña por la reelección y no buscan votos para Herrera, lo que ha llevado al propio Torrijos a hacer los llamados de atención. Todo indica que la candidata oficialista no sale de una para meterse en otra.