¿Por qué se celebra la etnia negra en Panamá?

Luego de los primeros viajes de Cristóbal Colón al nuevo continente y del subsiguiente periodo de colonización, el sistema feudal europe...

Luego de los primeros viajes de Cristóbal Colón al nuevo continente y del subsiguiente periodo de colonización, el sistema feudal europeo se asienta en las tierras americanas.

Los indígenas resultaron insuficientes para la explotación agrícola y minera al que los nuevos dueños del continente se dedicaban para enriquecer a las coronas. Carlos V de España impone las Leyes Nuevas y prohíbe el tratamiento de indios como reses. Fray Bartolomé de las Casas, el gran cronista español de la conquista y de la colonización recomendaba la esclavitud de los africanos para aliviar la dura suerte de los indios.

LA TRATA DE NEGROS

En 1518 la Corona dio la primera licencia para introducir a 4.000 hombres africanos a las Indias en durante ocho años. Este fue el primero de aquellos asientos de negros, que se constituyeron en a ensangrentada y lucrativa fuente de ingresos para los gerentes de Europa. Además del negocio oficial hubo también un negocio de esclavos en contrabando ejercido por piratas y comerciantes no católicos. (Wikipedia, Enciclopedia Libre)

La trata de negros africanos de la costa occidental y del centro de África era parte del negocio llamado ‘comercio triangular’. Cargaronron, tabaco y armas en Europa, lo cambiaron por esclavos y marfil en África y vendieron los esclavos con lucro en América, de donde regresaron con materias primas y minerales a Europa. Durante el tránsito aproximadamente 50% de la ‘carga’ esclava murió. Los que sobrevivieron fueron vendidos en las ferias, donde desnudos y engrilletados se les examinaban todos los orificios, boca, vaginas, anos, oídos para asegurarse de que venían sin enfermedades y que tenían la fortaleza para el trabajo sin horario de las grandes fincas y plantaciones.

LA RUTA DE LA ESCLAVITUD

La ruta de este negocio, asentado en las Antillas se trasladaba hacia Cuba, de ahí a las ferias de negreros de Williamsburg, Virginia, por todo el Golfo de Méjico en la ruta del Gran Misisipi, bajando por el Golfo de Méjico a Yucatán, Veracruz, las Honduras Británicas (hoy Belice), Nicaragua, Costa Rica, Panamá (Bocas del Toro) al Camino de Cruces en el Atlántico y atravesaban el Istmo hasta Pedasí, Mensabé, Monagrillo, la isla de Otoque, el Archipiélago de las Perlas (Contadora) rumbo a Ecuador, Perú y terminaba en Natal, Brasil. A este tránsito se le conoce como ‘la ruta de la negritud.’ Se estima que alrededor de catorce millones de esclavos fueron transportados a las Américas, la mayor diáspora o dispersión racial y cultural del mundo.

Debido al maltrato inhumano, muchos de estos esclavos se rebelaron. Conocida es en la historia de Panamá de Felipillo y Bayano que huyeron por la Costa norte del Istmo y se asentaron en el área que va desde Darién por Guna Yala, Costa Arriba y Costa Abajo de Colón hasta Punta Cabuya en Veraguas. Estos esclavos formaron aldeas que posteriormente se constituyeron en palenques, cumbés o quilombos.

EL MESTIZAJE

La gente africana obviamente con el tiempo se mezcló, con el indígena y con el europeo, constituyendo al ‘cholo morado’, y los mestizos, y muchas otras combinaciones; la mayor parte de la población negra se identificaría simplemente como ‘mestizo’, en vez de negro, mulato o zambo, más por virtud de sus rasgos culturales (Goytisolo, 1999)

El conquistador español tenía una edad promedio de 25 años--más del 65% de españoles de rangos inferiores-- y entendía su misión en América como extensión de la reconquista española. El mestizaje en este continente surgió, por ello, simultáneo a la llegada de los europeos a América. De hecho, la mayoría de los descendientes de los grandes conquistadores españoles en la primera mitad del siglo XVI, eran mestizos (Mann, 2012).

LAS PRIMERAS MIGRACIONES DEL CARIBE

Entre 1725 y 1820 durante el periodo post colonial, ingleses de las Antillas mayores –Jamaica, Barbados, San Vicente, Trinidad, Tobago, San Cristóbal y Santa Lucia, buscan territorios para asentarse con sus esclavos, explotar el agro y poblar la Costa Atlántica. Surgen las grandes plantaciones de banano, cacao, copra, coco, madera y otros insumos que atrae una gran inmigración de ingleses blancos con sus esclavos mestizos y negros de las Antillas caribeñas, anglohablantes todos. En este proceso, se asientan el área norte de Bocas del Toro, en el archipiélago, en Almirante y en la costa norte de Chiriquí Grande.

LAS MIGRACIONES POSTERIORES

La construcción del Canal francés, 1898-1902, trae a Panamá inmigraciones de las Antillas Francesas—San Bartolomé, San Martin, Bonaire, Martinica, Guadeloupe—y de África- Monrovia, Liberia, Camerún y Costa de Marfil. Después del fracaso de De Lesseps y muchos de estos inmigrantes regresaron a sus lugares de origen; otros se dispersan por el Istmo estableciéndose en Almirante, en las florecientes bananeras y otros en el área azuerense. Apellidos como Feuiellebouis, Feuillet, Bourdett, Franscechi, Frequeten, Villiers, Couvrie, Cousins, Cozier y otros dan fe de esta inmigración. En la ciudad de Panamá, radicaron mayormente en el área hoy conocida como Calidonia (Justavino, 1975).

EL CANAL Y LA VIDA DEL ANTILLANO EN PANAMÁ

Con la construcción del Canal norteamericano, entre 1903 y 1915, llegaron más de 75,000 afroantillanos anglohablantes de las Antillas mayores; en dos migraciones multitudinarias se radicaron en las áreas concomitantes al Canal, Colón, Bocas del Toro, el Chorrillo, Rio Abajo, Parque Lefebvre, Sabanas, Monte Oscuro, Pueblo Nuevo, Carrasquilla. Luego de constituirse en parte la cultura del panameño, en 1926, 1941 y 1946, el gobierno nacional les negó la nacionalidad y no es hasta 1956 cuando estos afro descendientes pudieron gozar de la nacionalidad panameña, a pesar de trabajar y colaborar con la panameñidad conjugada en nuestra cultura, comida, bailes, modas, y maneras de hablar.

Los resultados inmediatos de esta restricción provoca que tres generaciones consecutivas de afro descendientes de habla inglesa y francesa, hispanizaran sus apellidos, perdieran su habla (creól—patuá o guari-guari) y se asimilaran aún más con el resto de la población con matrimonios mixtos, reforzando el mestizaje ya arraigado en el periodo colonial, pos-colonial y pre-republicano de Panamá. Prueba de esto apellidos como Castaño, Pardo, Moreno, Iglesias, Díaz, Mafla, Fula, Masaya, Peynado, Manuel, Macala, generados de Brown, Weeks, Church, Muffler, Fuller, Mesiah, Combs, Emmanuel y McCollough, entre muchos otros. Cabe resaltar que este fenómeno de asimilación por castellanización del apellido ocurrió también con las otras ‘inmigraciones ‘indeseables’ como la china, indostana y judía, según la constitución de 1941. Estas diferencias y políticas discriminatorias se afianzaron mucho más con el sistema de ‘Gold Roll’ y ‘Silver Roll’ vigente hasta 1955, que se aplicaba a todos los panameños que laboraron en el Canal de Panamá (Justavino: 1975, Newton, 1987, Westermann, 1950).

EL DÍA DE LA ETNIA NEGRA

Los esfuerzos de unificación nacional y las luchas generacionales de los afopanameños por la justicia y la igualdad protagonizados por diferentes grupos desde 1960 hasta la fecha, le otorga sentido a los Decretos Ejecutivos No. 124 de 2005, Decreto Ejecutivo del 2006 y el Decreto Ejecutivo no. 117 de 2007 que establecen las bases oficiales para la implementación de políticas publicas de inclusión y celebración de actividades culturales para resaltar la etnia negra en Panamá, sin distingos de procedencia, ya sea hispánica o antillana.

Hay quien cuestiona estos esfuerzos desde una visión histórica, social o política, alegando que el panameño no necesita de este tipo de manifestaciones. Empero, se hace obvio, que dado el origen de la composición étnica hispanoamericana de mestizaje y, la connotación peyorativa que se le ha dado en su composición afro descendiente en América Latina contraria al valor prioritario que se le ha otorgado al encuentro con los europeos, es motivo de celebración que en Panamá podamos manifestar el orgullo de nuestra diversidad y riqueza etnica y cultural.

Celebremos entonces, al hombre universal de América, mestizo y afro descendiente.

DOCENTE UNIVERSITARIA

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