El barrio de Chualluma en Bolivia, es único en la ciudad de La Paz ya que todas sus paredes están pintadas de colores que resaltan los rostros de las cholas,...
- 27/05/2020 00:00
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El maestro del arte contemporáneo panameño Aristides Ureña Ramos nace en la provincia de Veraguas, en 1955, sintiendo desde temprana edad, el llamado del arte.
Las ganas de instruirse en este campo y la frase motivadora de su madre “sea cual sea la profesión a la que te dediques, asegúrate de destacarte y hacerlo con amor”, fueron el motor que le impulsó a tomar el sendero de la pintura.
En 1978 se graduó en la Academia de Bellas Artes de San Marco, Florencia, Italia.
Las obras del artista han recorrido Venezuela, Bolivia, Cuba, Nicaragua, Ecuador, Brasil, Argentina, Estados Unidos, y parte de Europa, participando de las bienales de Venecia desde 1986.
Ureña es reconocido por la crítica florentina y europea. Entre los galardones que ha recibido por su trabajo destacan la Medalla-Trofeo Putto D'Oro, de Montespertoli, Italia, en 1978; Lo Stivale, por su obra gráfica en Candeli, Italia (1980); Villaggio Artigianale-Signa (1981); el premio Italia para las Artes Visuales, Giovanni Angelico, Florencia, Italia, en 1992 y 1994. Kunst- en Kultuurkring Internacional Mérito Medalla de Oro -Brabante Flamenca- Castillo Coloma Kasteel, Bélgica, en 2011.
En esta ocasión, el pintor panameño estará presentando un paño mural denominado 'Puente del Mundo Corazón del Universo', que estará en el Salón de la Paz de la Presidencia de la República, una obra con la que cierra su ciclo pictórico titulado 'República Popular de Panamá'.
Con la introducción de esta pieza, Ureña se convierte en el segundo pintor panameño en ingresar al palacio presidencial, después de Roberto Lewis, quien cuenta con 11 murales en el salón Amarillo y un cuadro que forma parte del salón Los Tamarindos.
El pintor cuenta que la idea de hacer un cuadro que representara la alegoría panameña comenzó desde su niñez. “Los recorridos que hice con mi padre y el amor por mi cultura, me sirvieron de inspiración”, reconoce.
El profesor Ureña expone que, desde 2009, inició con los bosquejos de esta pieza, hecha sobre un paño mural. “En esta pintura podrán apreciar las jornadas, que representan el momento en que se abre paso a la alegoría. El escenario de este arte es la zona canalera, que es el lugar donde se desarrolla todo”.
Cuenta que otro de los aspectos que destaca en esta obra es la soberanía. “La lectura de esta pintura empieza de derecha a izquierda, donde está la bandera, la alegoría nacional, en la cual se ve a una mujer vestida de pollera que está llegando en una carreta repleta de personas; en el cuadro también plasmo la vestimenta de las mujeres afrodescendientes. En toda la pintura hay una mezcla de la diversidad cultural que caracteriza a nuestro país”.
“En la parte inferior del mural pinté a una mujer tocando el violín, lo que representa la música folclórica de Panamá. Otras de las cosas que se pueden encontrar en mi obra son la diosa de la sabiduría y las repeticiones de barcos, porque nuestro país es una zona de tránsito”, manifiesta.
Un punto que destaca es que en el mural se encuentra un retrato de 'Tío Tigre', un personaje que forma parte de las leyendas locales narradas en el interior del país.
“En la pieza retrato a la población indígena que muestra la unión y el trabajo de esa comunidad, incluso plasmo las diversas religiones que hay en Panamá y el festejo de los nacionales por el traspaso del Canal a manos panameñas”, sostiene.
En el mural predomina el color azul y en el marco el tono verde. Ureña cuenta que escogió ambos colores porque uno representa los mares de Panamá y el otro muestra la belleza de la naturaleza local.
“El color azul me lleva a repasar momentos de mi infancia. Cuando era pequeño, mi mamá me teñía la camisa blanca con añil, por eso me dije: 'el azul, es el color', así que empecé a pintar los cuadros utilizando este tono. Cuando pinto con ese color, me expreso con mayor facilidad”, explica
Con voz alegre, el artista reconoce que las palabras no le alcanzan para expresar el sentimiento de orgullo al saber que su cuadro estará en el Salón de la Paz.
“A mis 66 años esto representa la culminación de un sueño, y una promesa. Para mí es un honor. Desde pequeño siempre estuve preparado para un momento como este. He dedicado mi vida a hacer un arte que represente a Panamá. Aún no sé si sea cierto, todo queda a juicio del pueblo, que dirá si realmente contempla este mensaje en mi pintura”.
Ureña reiteró la importancia de expresar la cultura nacional a través del arte. “Panamá se ha quedo encerrado en el realismo artístico porque es más fácil, hay que poner obras que sean distintas y que reflejen lo bello que somos como país”.
El artista multidisciplinar comparte que tras haber culminado su ciclo pictórico con 'República Popular de Panamá', ha iniciado 'Panamá Pepper', y sus obras están orientadas a dar un mensaje.
“Panamá no es un país de contrabandistas; esa ironía que estoy aplicando es para demostrar, a través del arte, que los panameños somos gente seria, profesional, y aunque somos un territorio pequeño, nuestra patria va hacia la práctica de la excelencia en todos los ámbitos”, dice.
El pintor admite que este nuevo ciclo pictórico le llevará a enfrentarse a grandes desafíos en cuanto a la investigación y experimentación, pero dice estar dispuesto a aceptar los retos marcando el estilo que lo caracteriza en cada una de sus obras.