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- 21/05/2009 02:00
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PANAMÁ. Además de su exitosa trayectoria musical, durante los últimos cinco años Rómulo Castro ha trabajado en el Instituto Nacional de Cultura (INAC) con el afán de contribuir a definir y planificar una ley de promoción cultural.
Desde hace tres años se desempeña como asesor del director de esta institución. “A partir de septiembre del 2004 empezamos a levantar un inventario de los antecedentes que existían en materia de reformas a leyes culturales”, señala el músico.
Posteriormente, se procedió a convocar a los diferentes intelectuales panameños con el propósito de reunir los diferentes aportes de cada uno e identificar los problemas más severos.
“Luego recurrimos a los organismos internacionales pertinentes para empaparnos en las principales experiencias iberoamericanas en la reforma del sector cultural”, comentó.
El resultado de estas iniciativas ha sido un proyecto de ley que, de acuerdo con Castro, se encuentra listo para presentarse en la Asamblea Nacional de Diputados. “Corresponde a la dirección del INAC poner en manos de la próxima administración gubernamental todo lo adelantado en este tema”, puntualiza.
Según el compositor, la propuesta contempla otorgar al INAC un rango ministerial, aunque no se le denomine como un ministerio.
“Hay que dejar de hablar de la cultura como un gasto”, precisa. Para Castro es necesario emular el ejemplo de países como Brasil, Colombia y México, donde existen industrias culturales que aportan de forma significativa al producto interno bruto de estas naciones. “Si empezamos a invertir en la gran diversidad cultural del Istmo, el arte local podría convertirse en una industria que genere miles de empleos y millones de dólares al fisco”, indica.