Los hijos de dos leyendas

El matrimonio conformado por Jackie y John tuvo cuatro hijos: Arabella, quien falleció antes de nacer; Caroline y John, los dos que sobrevivieron y Patrick, quien nació y murió en 1963. Caroline y John vivieron alejados del clan Kennedy, porque su madre los quiso proteger del escrutinio que esta dinastía ha sufrido desde siempre.

Pese a crecer sin padre, vivir con un padrastro millonario por un breve periodo de tiempo, al parecer su madre hizo un buen trabajo, porque ambos alcanzaron logros profesionales y personales lejos de las influencias de su familia paterna. Ambos mantuvieron mucha cercanía con su madre hasta el final de sus días y entre ellos hubo una relación cultivada de amor y amistad, rota por el trágico accidente aéreo que le costó la vida a uno de los más guapos jóvenes de la sociedad de NY, John John, quien viajaba acompañado de su esposa Carolyn Bessette y su cuñada Lauren Bessette.

Caroline mantiene relación con su familia paterna, pero su vida personal pocas veces ocupa las planas de los medios, no así la de su hermano que cautivó a la prensa y a muchas celebridades por poseer el encanto de sus padres, mientras vivió. Ella apenas hizo una aparición muy reservada en las elecciones que dieron el triunfo a Obama, afirmando: “Creo que nos motivará como lo hizo el presidente Kennedy”. Jackie consiguió proteger a sus hijos de la mirada del público y de todo ese morboso interés que despertaba la viuda de América y les procuró una infancia lo más normal posible para su status.