El hogar es tarea de todos nosotros

  • 15/06/2014 02:00
El mantener un hogar funcionando de manera óptima no debe ser solo responsabilidad de los padres, sino de todos los miembros de la familia

Cada día, en diferentes partes del mundo, los roles de género van siendo superados. Labores domésticas como cocinar, lavar o limpiar la casa ya no se consideran actividades exclusivas del género femenino. Ha sido un cambio que ha permitido la incorporación de la mujer al mundo laboral que existe fuera del hogar, invalidando así el estereotipo de que el lugar de la mujer estaba solo en la casa.

Los hombres participan cada vez más en la responsabilidad del manejo de las cargas familiares y las tareas del hogar, aparcando la idea de que su función en la casa estaba limitada a ser exclusivamente la de un ‘handyman’ que aparecía en caso de reparaciones urgentes o cuando la fuerza física era necesaria.

FAMILIA AL RESCATE

En décadas pasadas la familia, especialmente los abuelos y tíos, ocupaban una parte fundamental en el cuidado y la crianza de los hijos, pero esto se ha ido perdiendo con el trascurso de los años, principalmente por la movilidad geográfica impuesta por motivos laborales.

Frecuentemente las familias acaban separada. A causa de las distancias, las visitas se van haciendo cada vez más esporádicas. Cuando los padres no pueden cuidar de sus hijos (ya sea por trabajo, enfermedad o por variadas obligacione) nadie mejor para reemplazarlos que alguien de la propia familia. Para complicar aún más la situación, el servicio doméstico -que hasta hace unos años en Panamá solía ser bastante asequible de conseguir a un costo razonable- se ha convertido en un verdadero lujo.

Cada vez son menos los jóvenes que están dispuestos a realizar estos tipos de trabajos, sobre todo si se ven forzados a pernoctar en la residencia de los empleadores. Es por esta razón que hoy en día muchos padres cuidan a sus hijos sin apoyo o ayuda de nadie, una situación que se complica con la presencia de recién nacidos e infantes en el hogar.

Adicional a esto, son cada vez más los menores y jóvenes que se involucran en actividades extracurriculares, como entrenamientos deportivos o cursos de música, por lo que los padres literalmente deben multiplicarse para poder abarcar las necesidades de transporte y logística, con el consiguiente estrés que conlleva.

CRONOGRAMA DE TAREAS

Uno de los sistemas más efectivos para mantener el orden y buen funcionamiento del hogar es hacer un cuadro o programación mensual de las diferentes tareas domésticas y ubicarlo en un sitio visible a todos.

Así, y dependiendo de los horarios de los diferentes miembros de la familia, se adjudicarían las correspondientes responsabilidades buscando la mayor ecuanimidad en su reparto. Por supuesto no se le puede pedir a un menor por ejemplo que cocine con gas, planche ropa, o tale un árbol, pero perfectamente puede colaborar en otras muchas actividades como desempacar la compra del supermercado, rastrillar las hojas del patio, o lavar el carro.

Seguramente las primeras veces la ejecución no será todo lo buena que sería de esperar, pero como dice el refrán ‘la práctica hace al maestro’.

Para no caer en la monotonía, es preferible ir rotando en lo posible las tareas para que así todos los miembros aprendan lo que cada una de ellas supone y el esfuerzo que conlleva su ejecución. De este modo se suple una de las carencias que he podido observar en muchas personas de no saber apreciar si algo está bien realizado o se puede hacer mejor, porque nunca les tocó personalmente hacerlo.

Así si llegamos a tener la fortuna de contratar a un tercero para estos oficios sabremos como mandarle y que haga las cosas a nuestro gusto, y sin tomar más tiempo del necesario.

SOLIDARIDAD FAMILIAR

Cuando todos los miembros de la familia se involucran y son solidarios en mantener un hogar limpio y agradable, es menos frecuente que se produzcan conflictos entre ellos, ya que son parte de un proyecto en común.

De ese modo cuando uno de los miembros utilice un área de uso compartido como puede ser la cocina, intentará ser considerado y ensuciar lo menos posible, sabedor de que podría ser el mismo el que tuviese la responsabilidad final de limpiarla.

Lo Nuevo