Sale de la cárcel la asesina de Maurizio Gucci

Maurizio Gucci, el cabeza de la famosa marca de moda italiana, murió asesinado cuando salía de su casa. Hoy, 18 años después sale de prisión su asesina, nada más y nada menos que su exmujer, Patrizia Reggiani. Fueron tres tiros los que se le propinaron a Gucci y Reggiani tuvo que pagar 26 años de cárcel. En aquella época todo trascendió como de película. La policía buscaba pistas que la llevaran hasta los culpables del mafioso hecho y al mismo tiempo Patrizia esperaba en casa que le llegara la noticia de que el pistolero que había contratado terminaba su misión.

En el momento del asesinato Maurizio Gucci acababa de vender su parte de la empresa a unos empresarios árabes por 17 mil millones de pesetas de la época.

Patrizia ha salido en libertad tras la petición de su abogado de que se conceda su tutela a los servicios sociales. Y de seguro aprovechará para cumplir una de las metas que ya ha mencionado en otras ocasiones, trabajar en una marca de moda de Milán.

Hace dos años se le había ofrecido la posibilidad de adquirir libertad parcial, lo que implicaba ir a dormir a la cárcel, pero a ella no le pareció buena la idea pues en ese entonces se negaba a trabajar puesto que nunca antes lo había hecho.

Desde 2005, la condenada salía 12 horas de su celda cada 15 días para ir a visitar a su madre, que vive en la mansión que su marido dejó en herencia a las dos hijas que tuvieron juntos.

El trágico fallecimiento de Gucci, hijo del fundador de la marca, mantuvo en vilo al país durante meses por el misterio que lo rodeó. El elenco, en el que la Reggiani era la actriz principal, se completaba con una vidente que actuaba como consejera de la instigadora del crimen; y dos años después de la muerte se conoció la verdad.