‘Felicidad eterna’ en el concierto de Danny Ocean en Panamá

Un joven levanta su prótesis de pierna, está entre el público bailando y coreando “mueve tu cuerpo, felicidad eterna, siente la electricidad subiendo por tus piernas, grítale al mundo que tú eres guerrero. La vida es sangre, sudor y fuego”. Fuera del mercado es una de las canciones más escuchadas de Danny Ocean, la canta a mitad de concierto en Panamá.

Daniel Alejandro Morales Reyes, Danny Ocean, se presenta en las Islas de Atlapa. La fiesta comienza desde las 6:00 p.m. del jueves 1 de junio, en el lobby hay diferentes puestos de comidas y bebidas. Además, hay spots para que los asistentes se tomen fotos y graben videos. Una DJ está a un costado ambientando con música electrónica y reggaetón.

A las 8:00 p.m. la banda panameña Entre Nos sube al escenario, rockean, cantan, bailan e interactúan con el público durante media hora. A las 9:00 p.m. la banda colombiana Timø interpreta sus temas más virales en las plataformas de streaming, como Bebamos, Espejito, espejito y Juernes. Hasta su más reciente lanzamiento grabado en colaboración con Andrés Cepeda, Conquistar el planeta.

Minutos antes de que Danny Ocean suba a la tarima, al fondo de la misma se proyecta un código QR, al escanearlo un enlace abre fotografías cómicas de él y datos curiosos sobre su vida.

Se apagan las luces, comienza a sonar la batería, se unen el bajo, la guitarra y el teclado. Segundos después, se oye “voy a robarte un beso que te recuerde este momento bailando el dembow”, parte del coro de la canción Dembow. El cantante venezolano viste una tshirt estilo tie-dye, pantalón negro y zapatos deportivos. Usa lentes oscuros y el cabello con dos trenzas en la parte de atrás.

Sigue con Babylon Girl. Hace una pausa y dedica unas palabras a los asistentes, “¿cómo están los de allá atrás? Hasta que por fin hacemos Panamá, gracias por la paciencia. Un honor para nosotros estar aquí esta noche, les recuerdo que vinimos a disfrutar. Si se la saben, los quiero conmigo”, dice antes de cantar Cuando me acerco a ti.

Sentado, ahora interpreta Báilame. Revela que tiene la voz afectada y continúa con Instabul. El público eufórico lo acompaña en Volare. Suena Bikini, tema que canta originalmente, junto a la banda de reggae Rawayana.

El jazzista de la banda hace un solo al final de Mónaco. Se le une el resto de la orquesta y durante unos minutos están solos con el público, sin Danny Ocean. Se apagan las luces, todos salen del escenario y suena Brisa, esta vez es la pista grabada, se oye mientras ellos están tras escenario en un descanso, pero la cámara los sigue y los muestra a través de la pantalla al fondo de la tarima.

Ahora vestido de negro canta Amapolas, Dime tú, Miedito o qué. Baja de la tarima y comparte con los fanáticos. Sube a una pasarela que está en medio del público y expresa: “Todo el mundo con la mano así (levanta el dedo meñique, índice y pulgar), esto quiere decir te amo en lenguaje de señas. Sé que muchos viven aquí, pero no son de acá, mis respetos porque sé que no es fácil. Hemos aprendido a través de esa aventura que todas las veces que la vida nos manda, la mala respondemos con la buena, esta canción se llama Fuera del mercado”.

Se escucha Siwng y Vuelve. Le da el micrófono a un joven que está en el público y tiene un cartel que dice “dile a mi babylon girl que sea mi novia”. El artista le pide que se lo diga el mismo, la joven dice que sí.

Finalmente, a cappella canta Me rehúso, la multitud corea junto a él. Atraviesa la pasarela y desde el centro del escenario despide el espectáculo con el tema que lo catapultó como artista. La canción tiene el récord como la más descargada de la última década en la plataforma Spotify. La escribió tras migrar de su país natal hacia Estados Unidos, el artista ha relatado a diversos medios que se la compuso a una novia que dejó en Venezuela, no tenía dinero para enviarle un regalo de San Valentín y creó el tema.