'Luis Miguel' y 'Sombra y Hueso' se abren espacio en Latinoamérica

Al pensar en las series que se han estrenado durante la pandemia, podríamos hacer un recuento de algunas que nos han marcado de buena y mala manera, algunas que han sido éxitos rotundos y otras que ganaron un lugar en la palestra pública por las razones equivocadas, sin embargo, en el primer trimestre de 2021 se han presentado algunas producciones que han captado la atención de un gran número de consumidores del streaming en la plataforma Netflix, tales como la serie biográfica de Luis Miguel y la adaptación del libro Sombra y Hueso de la escritora Leigh Bardugo.

Pese a que sus géneros son opuestos –uno se enfoca en la vida real de un ícono de la música latina y otra se destaca por un ambiente de fantasía mezclado con una Rusia zarina–, las tramas y el diseño narrativo de ambas producciones hacen que sean opciones dignas de ver en una tarde, con suma atención. Por su parte, la serie que retrata los inicios y la carrera del 'Sol de México', fue estrenada en 2018 con pocos episodios, pero el pasado 18 de abril su telón visual volvió a subir y ha continuado desgranando episodios nuevos dominicalmente, dando poco a poco una mirada más amplia de la historia a los fanáticos.

Durante los primeros tres episodios de la nueva temporada, vemos a un 'Luismi' que intenta hacer balance entre su carrera artística, su relación con sus hermanos y su relación con su hija, Michelle Salas. A medida que avanzan las escenas, la actuación de Diego Boneta, quien encarna a Luis Miguel, deja en evidencia sus sombras, preocupaciones y desconfianza. “Un Luis Miguel que llama la atención”, según describió el guionista de la serie Daniel Krauze, en una entrevista con el medio digital TeleShow.

Antes del estreno de los primeros tres episodios (el último salió disponible el pasado 25 de abril), la información se había dado como a cuentagotas y no se conocía mucho (por no decir nada) del giro de la narrativa que traería la segunda temporada, ya que una de las mayores presencias de la historia fue Luisito Rey, interpretado por Óscar Jaenada, quien cumplió como “villano” y fuerza opuesta a Luis Miguel. Según Krauze, la salida de Jaenada ya era parte de la nueva dirección, sin embargo, al equipo de escritores les costó adaptar la línea continua de la historia para mostrar un nuevo enemigo de 'Luismi': sus claroscuros.

“Conscientemente no quisimos replicar a Luisito Rey. Es decir, no quisimos decir 'Bueno, ya perdimos a Luisito Rey, no pongamos a otro villano que cumpla el mismo papel'. Es que no se puede”, comentó el guionista según Infobae. “Entonces había que plantear nuevos dilemas para el personaje: había que encontrarle nuevos problemas, nuevos obstáculos, nuevos conflictos. Y una de las soluciones fue continuar con estas dos líneas de tiempo y explorar sobre todo la línea de 2005, pues es la que tiene más claroscuros del personaje”.

Otra de las miradas nuevas al personaje del 'Sol' es su relación con su hija, reconocida después de 11 años, Michelle Salas (hija de la actriz Stephanie Salas). “La quise alejar de la chica que conocemos porque me pareció importante que se vea el proceso de convertirse en Michelle”, compartió con la revista GQ, la actriz Macarena Achaga, quien la interpreta. “Me parecía importante contar cómo empieza esa historia, quién es esa niña que tiene el corazón roto, que se convierte en esta mujer que, básicamente, no necesita de nadie”.

Las relaciones amorosas de el 'Sol' fueron escandalosas en la década de 1980 hasta pasado el año 2000, sin embargo, en la serie dirigida por Humberto Hinojosa y Natalia Beristáin, se dará más énfasis a su relación con la nieta de Silvia Pinal, Stephanie Salas, con quien tuvo a su primogénita y a quien se le ha cambiado el nombre en la serie a 'Sophie' y es interpretada por Pilar Santacruz.

Con una narrativa dramática, pero sin exagerar entre la ficción y la realidad, 'Luis Miguel: la serie' se ha convertido rápidamente en una de las series más esperadas por la comunidad latinoamericana suscrita a la plataforma de streaming Netflix (y desde antes, al ser transmitida por televisión nacional en México). Con sus nuevos episodios, Krauze indicó a Infobae que “no sé cómo va a reaccionar la gente cuando termine de ver el último capítulo, pero yo estoy satisfecho por mi trabajo”.

“Es decir, esa sensación que tienes cuando llegas a presentar un examen y no puedes haber estudiado más... Eso es lo que siento ahora: no pude haber trabajado más en la segunda temporada. Y creo que no solamente yo: los productores, los directores, mi equipo de escritores y los actores. Entonces, estoy tranquilo. Estoy extrañamente tranquilo precisamente por eso, porque sé del esfuerzo que está ahí. Ahora esperemos que al público le guste”, expresó.

Como una adición bienvenida al catálogo de series de fantasía de Netflix, llegó el pasado 23 de abril la serie Sombra y Hueso, una adaptación televisiva del libro homónimo escrito por Leigh Bardugo. Con un toque de fantasía oscura, la serie dirigida por Eric Heisserer se ha apegado mucho a su material de origen, sin ignorar los ajustes necesarios para el éxito de cualquier historia basada en ficción: una narrativa interesante y personajes entrañables.

Pese a su poco tiempo al aire, se ha destacado por recibir buenas críticas internacionales y un gran revuelo en redes sociales por parte de la comunidad juvenil en Latinoamérica. Su principal elemento diferenciador es que Sombra y Hueso no busca ser el próximo Juego de Tronos o The Witcher, alejándose de algunos estereotipos desgastados y no dando espacio a una comedia absurda. La historia se centra en “un mundo asolado por la guerra donde la huérfana y soldado raso Alina Starkov acaba de desencadenar un poder extraordinario que podría ser la clave para liberar a su país. Ante el acecho de la monstruosa amenaza de la Sombra, Alina es arrancada de su entorno familiar para entrenarse y formar parte de los Grisha, un ejército de élite integrado por soldados mágicos”, según la sinopsis provista por Netflix.

Alina (interpretada por Jessie Mei Li) es una joven que desde el primer episodio se presenta como una soldado y cartógrafa dispuesta a todo para descubrir cómo erradicar a la 'Sombra', un ente físico y fantástico en forma de valle ancho y extenso, que ha causado la muerte y desaparición de sus padres, así como de miles de personas de su patria. Sombra y Hueso es el primer libro de la trilogía de 2012, 'Grishaverse' de Leigh Bardugo, el cual gira en torno a una sociedad intrincada y devastada por la guerra, inspirada en la Rusia zarista del siglo XIX. En la serie se respeta la dirección de Bardugo, pero a su vez se mezcló la narrativa oscura, dramática y de carácter urgente que presenta la duología (Seis de Cuervos), también de Bardugo, aunque esta se ambiente tras los eventos de Sombra y Hueso.

Con un “villano” interpretado por Ben Barnes como el general Kirigan, la historia de Alina se entrecruza con la de los demás personajes, todos con sus propios intereses y motivos, personalidades diferentes, pero como imanes, y una presencia actoral que evita que el aburrimiento ataque, como suele suceder en series con demasiado drama y poco espacio para la asociación de los eventos por parte del espectador.

Personajes como Inej Ghafa (Amita Suman) y Kaz Brekker (Freddy Carter) ayudan al ritmo de la serie, y la presencia del pistolero Jesper Fahey (Kit Young) se ha convertido en un favorito al que habrá que prestarle atención en la segunda temporada de la serie que, aunque no se ha confirmado aún, no sorprendería su llegada a finales de 2022 o antes.

“No depende de nosotros si podemos ejecutarlos, pero tenemos muchos planes y varios libros que tienen mucho camino por recorrer. Pero, como mis lectores saben, me encantan los buenos momentos de suspense. Quiero que queden satisfechos en el final de la historia, pero desesperados por más, así que creo que Eric lo logró bastante bien”, aseguró Bardugo al medio especializado CBR.

El carácter de Alina se irá desarrollando a través de los ocho episodios de una hora de duración hasta el momento en que los espectadores descubran, junto con ella, la activación de sus poderes que podrían ser la herramienta clave para salvar a todo su mundo. Y sí, Sombra y Hueso repite la narrativa del 'elegido' pero su diseño victoriano y el detalle de los diálogos hacen que el suspense y la búsqueda de respuestas se conviertan en el motor para devorar la serie en un día y querer repetirla, o incluso, buscar su material de origen para tener una visión más real de la imaginación de Bardugo.

La construcción del mundo de Sombra y Hueso es un avance en la calidad de producción de Netflix que no se había visto desde The Witcher, con series como Destino: La Saga Winx o Cartas al Rey dejando un sinsabor a los fanáticos de la fantasía y la épica. Sin embargo, el equipo liderado por Heisserer parece haber entendido y ejecutado lo que sirve como ejemplo para otras producciones, puesto que lejos de subestimar a la audiencia, le ha brindado un viaje de aventura, traiciones y madurez que podría continuar como un éxito de llegar a una segunda parte.