38% de estudiantes universitarios brasileños no domina lecto-escritura

El 38 por ciento de los estudiantes universitarios brasileños no dominan las habilidades básicas de lectura y escritura, según un informe del Indicador de Analfabetismo Funcional (INAF) divulgado hoy por el Instituto Paulo Montenegro y la ONG Acción Educativa.

El INAF, que se aplica a 2.000 personas de entre 15 y 64 años, evalúa el desempeño de los participantes en varias pruebas según las respuestas a 38 preguntas relacionadas con cosas cotidianas.

El indicador clasifica los resultados en cuatro niveles de alfabetización: plena, básica, rudimentaria y analfabetismo. Si el evaluado no logra el nivel pleno, se considera que es un analfabeto funcional.

Así, los resultados del INAF muestran que apenas el 26 por ciento de la población puede catalogarse como plenamente alfabetizada (el mismo nivel obtenido en 2001, cuando se calculó por primera vez).

Los analfabetos funcionales representan el 27 por ciento, y la mayor parte (47 por ciento) de la población presenta un nivel de alfabetización básico.

"Los resultados muestran que Brasil ya avanzó, principalmente en los niveles iniciales de alfabetismo, pero no consiguió progresos visibles al alcance del pleno dominio de habilidades que son hoy condición imprescindible para la inserción plena en la sociedad letrada", indicó el informe del INAF 2011-2012.

El estudio también señaló que hay una relación entre el nivel de alfabetización y el ingreso de las familias brasileñas: a medida que el ingreso crece, la proporción de alfabetizados en nivel rudimentario disminuye.

En la población con una renta superior a los cinco salarios mínimos, el 52 por ciento son considerados plenamente alfabetizados.

En la otra punta, entre las familias que reciben hasta un salario mínimo por mes, apenas el 8 por ciento corresponden a un nivel pleno de alfabetización.

Entre la personas de 50 a 64 años, el índice de analfabetismo funcional llegó al 52 por ciento, lo que se explica por la menor oferta de enseñanza que había en años pasados en Brasil.

La coordinadora general de Acción Educativa, Vera Masagao, explicó a los medios locales que los números indican una "popularización" de la enseñanza superior sin calidad, lo que explicaría la facilidad de algunos estudiantes analfabetos funcionales para entrar y mantenerse en las universidades del país.

Por su parte, la directora del Instituto Paulo Montenegro, Ana Lucía Lima, afirmó que "la preocupación del Gobierno fue con la cantidad; la inclusión de más alumnos en estas escuelas", pero "el informe apunta que ya es hora de que se invierta en la calidad" de la enseñanza brasileña.