E-GOV y o-GOV, ¿de qué estamos hablando?

Actualizado
  • 14/07/2013 02:00
Creado
  • 14/07/2013 02:00
PANAMÁ. Es común confundir ‘el fin’ con el ‘el medio’. Mucha gente cree que un ‘sistema’ es un ‘software’ y por eso muchas organizacione...

PANAMÁ. Es común confundir ‘el fin’ con el ‘el medio’. Mucha gente cree que un ‘sistema’ es un ‘software’ y por eso muchas organizaciones fallan a la hora de tratar de solucionar sus problemas, comprando algo pero sin cambiar nada.

Cuando los gobiernos desean generar transparencia en sus procesos y participar en la construcción de políticas y colaboración a la hora de implementarlas (gobierno abierto) se plantean dos necesidades.

La primera es cómo traducir esos principios a la filosofía de ese gobierno, pues si es verdad que se desea ser transparente por ejemplo, deben crearse procesos que así lo permitan.

La segunda en la implementación de estos procesos, es aquí donde se necesitan herramientas para hacerlo.

El ‘e-government’ o ‘gobierno electrónico’ no es más que el conjunto de herramientas tecnológicas que se necesitan para implementar todos los procesos que se diseñaron basados en la filosofía del ‘open government’ o ‘gobierno abierto’.

Cuando se comienza con la ‘herramienta’ sin un cambio fundamental de los procesos, las cosas casi siempre fallan.

Para muestra un botón: ‘open data’ hace parte de la filosofía del ‘open government’. Se basa en la premisa de que la información que todos le damos a los gobiernos es nuestra y se capta pagada con nuestro dinero. Lo lógico sería pensar que si la necesitamos la podemos usar.

Ya hay muchos gobiernos que tienen sistemas con esa información, pero a la hora de solicitarla el asunto no funciona. Se tiene la herramienta pero no se han creado los procesos que permitan la transparencia.

Es importante tener claro que las herramientas no son un ‘fin’, son el ‘medio’ por el cual se construye algo.

El ‘e-government’ debe implementarse luego que haya hecho una ‘revisión fun damental’ de los procesos gubernamentales, usando como tamiz los tres principios del ‘gobierno abierto’. No hacerlo así nos puede dejar con una costosa caja de herramientas que no sirven para la tarea.

Lo Nuevo
comments powered by Disqus