- 03/06/2014 02:00
El 90 aniversario de la muerte de Franz Kafka, que se cumple hoy 3 de junio, está siendo aprovechado por Praga, su ciudad natal, para homenajear por todo lo alto al escritor, mediante exposiciones, reinterpretaciones de sus escritos y conciertos.
Franz Kafka, autor de ‘El Castillo’ y ‘El Proceso’, es uno de los iconos de Praga, y su rostro aparece plasmado en placas, monumentos y tiendas de souvenirs.
Dentro de los actos de homenaje que se prolongarán hasta las próximas semanas, el teatro Svandovo ha preparado una adaptación de ‘La Metamorfosis’ donde el relato se desarrolla entre las butacas y el escenario, y que pretende sondear las relaciones familiares del público.
La compañía Sektor pro hosty ha preparado ‘Franz kafKABARET’, un montaje interactivo y en inglés en el que el público afrontará cuestiones existenciales para ayudar a los actores a resolver su neurosis.
Inspirados en obras más y menos conocidas del escritor, así como en su correspondencia amorosa, los actores del teatro Sklep propondrán por su parte una nueva lectura de Kafka, esta vez llena de energía y lejos del triste visionario de los problemas existenciales de la humanidad.
A su vez, la banda de rock Kafka Band interpretará en el Teatro Archa la banda sonora compuesta para ‘El Proceso’, una novela inacabada de la que se ha hecho una adaptación para cómics.
Unos cómics se podrán ver en el Ayuntamiento de la Plaza Vieja, dentro de una muestra titulada ‘El Proceso, original y metamorfosis’, en la que se expondrá el manuscrito original de la obra, de cuya redacción se cumple ahora el centenario. La marca Kafka es un imán turístico y ha dado alas a un museo monográfico situado en la Isla de Kampa, que emula dos iniciativas anteriores dedicadas a escritores célebres, el James Joyce Museum de Dublín y A Casa Fernando Pessoa, en Lisboa.
SU CIUDAD
Praga fue el marco literario del autor, y sobre ella dejó constancia minuciosa, aunque sin nombrarla apenas. Sucede cuando se leen pasajes de ‘El Proceso’ y se visitan los juzgados del Distrito I, en la plaza de la Fruta y se comprueba con qué detalle describía esos laberintos de oficinas y salas de audiencias.
Su nacimiento en la periferia del barrio judío, colindante con la plaza Vieja, en una plazoleta que lleva su nombre, su asistencia a la escuela secundaria en el Palacio de los Kinski o su actividad como actuario de seguros en un edificio de la calle Na Porici, forman parte de ese recorrido por la Praga de Kafka.