Las virtudes de la sencillez, sobre el escenario

A veces la simplicidad es la mejor virtud. Así lo aseguran Virginia García y Damián Muñoz, de la compañía de danza española La Intrusa. Su obra ‘Best of you', que se presenta mañana por la noche en el Teatro Anita Villalaz, ha sido destilada hasta dejar sobre el escenario solo lo esencial.

A su vez, la trayectoria artística y creatividad que los ha llevado a este punto es lo que les valió el mes pasado la distinción del Premio Nacional de Danza de España 2015, el más importante del país y que es otorgado por los reyes.

Los bailarines llegaron a Panamá el pasado sábado, en un vuelo procedente de México, y tras un recorrido por Uruguay, Brasil, Argentina y Ecuador.

Las directoras de Fundación Espacio Creativo (FEC), Analida Galindo y Marlyn Attie ya los conocían por su participación en el Festival Prisma de hace dos años, y al ver que se encontraban en el hemisferio, los invitaron a dictar un taller en el istmo.

‘Lo que enseñamos es nuestra forma de entender la danza, en la que el cuerpo solo es una herramienta más para contar nuestras historias', detallan los coreógrafos a La Estrella de Panamá desde un hotel de la localidad. ‘Más que en una forma, está basada en un tipo de energía o expresión'.

‘BEST OF YOU'

Elegido como un título temporal en el momento que sonaba una canción de los Foo Fighters, la pieza eventualmente encajó bien con el nombre ‘Best of you' y se mantuvo.

Se trata de un dúo, que cuenta la historia de tensiones acumuladas y la búsqueda del equilibrio entre dos personajes.

‘Depende de qué ojos lo miren, ven a dos amigos, a una pareja, a dos familiares, pero habla de las tensiones muy reales que pueden suceder en cualquier tipo de relación', explica Virginia, quien añade que el objetivo es que pueda evocar algo en el espectador según lo que esté viviendo en ese momento.

Para ellos, parte de la razón por la que ‘Best of you' logra generar empatía en el público es su sencillez.

La obra está desprovista totalmente de adornos, casi no hay elementos en el escenario. Esto hace que a nivel físico sea muy compleja, pues el cuerpo tiene todo el protagonismo.

Los coreógrafos, que se conocen desde niños y trabajan juntos hace 20 años, confiesan que la pieza nació hace cuatro, en un momento de madurez.

‘Cuando miras tu carrera y las obras que has estado haciendo, te das cuenta de que han sido el reflejo de lo que estabas viviendo en aquel momento, aunque de una forma inconsciente', sostiene Damián.

Al desarrollar esta obra, se encontraban en un momento de equilibrio maduro; divertido, con tensiones, pero en armonía.

LA INTRUSIÓN

Damián y Virginia se sienten intrusos, porque tienen una relación un poco distinta con la danza de la que se espera que tenga una compañía.

‘Aunque esta forma un poco desprendida de tratar la danza ha sido una virtud', confiesa Damián. ‘Es precisamente por esta relación que hemos llegado a muchos sitios'.

Y es que no se hacen llamar realmente una compañía de ‘danza', sino de ‘creación contemporánea'. Más que coreografías, dirigen y producen proyectos escénicos y audiovisuales.

Su trabajo tiene mucha influencia del cine y a la hora de desarrollar una obra, dedican casi un año a la creación de un guión antes de entrar a la sala de ensayo.

‘Cuando entramos al aula de ensayos, ya sabemos cómo es cada personaje, qué ocurre en cada escena', subraya Virginia. ‘Lo tenemos escrito, pero el cuerpo es el que lo tiene que contar todo'.

Para explicar más en concreto las intenciones de trabajo de ‘La intrusa', Damián nos refiere a la razón que ofreció el jurado cuando les confirió el Premio Nacional de Danza.

‘Por su excelencia en la investigación en la danza contemporánea ahondando en la fisicalidad y poética escénica tan identificativa de sus trabajos', sería su explicación.