Así lo confirmó el viceminsitro de Finanzas, Fausto Fernández, a La Estrella de Panamá
- 29/09/2022 00:00

El SARS-CoV-2 obligó a muchas personas a reinventarse, y el amor no fue la excepción.
Cuando abrazarse, dar la mano o un beso, o cualquier otra muestra de cariño estaban prohibidas, comenzaron a surgir muchos romances, pero de manera virtual con aplicaciones dedicadas a la búsqueda de parejas.
Tinder, considerada por expertos como la aplicación por excelencia para encontrar pareja en todo el mundo, llegó a sus 10 años el pasado 12 de septiembre.
Pero, ¿es esta herramienta una aplicación para enamorarse o solo para citas sin compromiso? ¿Por qué es tan famosa y qué la hace diferente a las demás? ¿Cómo prevenir o protegerse del acoso?

De acuerdo con los expertos, el éxito de esta aplicación y otras que han adoptado este sistema, es que más allá de buscar una pareja, la prioridad se vuelve una clase de diversión en la que se puede pasar el tiempo aprobando o desaprobando a la persona según el interés. Es decir, que los usuarios de Tinder encuentran pretendientes deslizando el dedo a la derecha, si alguien le gusta, o a la izquierda, para pasar al siguiente perfil, hasta encontrar al indicado/a.
Para Shantel Buggs, profesora del Departamento de Sociología de la Universidad Estatal de Florida, Tinder abrió la puerta a otros tipos de aplicaciones similares basadas en GPS, pero también hizo que las aplicaciones de citas que no estaban estructuradas de esa manera adoptaran esa estructura de deslizamiento en sus aplicaciones.
Según destacó la experta a la agencia de noticias EFE, la aplicación de citas a lo largo sus 10 años ha tenido más de 500 millones de descargas y más de 70.000 millones de matches (conexiones) en todo el mundo.
Además, Buggs detalló que el hecho de deslizar de un lado para otro no solo facilita usar la aplicación, sino que la convierte en un tipo de juego o pasatiempo.

“Cuando dos personas se sienten atraídas entre ellas, la aplicación les notifica este emparejamiento y les permite interactuar en un chat privado; a esto se le conoce como hacer match”, dijo.
La famosa plataforma, valorada en $3.000 millones, creada por Sean Rad, Justin Mateen y Jonathan Badeen, nació un 12 de septiembre de 2012. En un escenario lejano al de los años de 1980, donde la idea de conocer a alguien en línea era impensable, puesto que el internet aún no asomaba sus avances o idea de creación sino hasta finales de 1990.
Una década después de ser concebida, esta red geosocial continúa liderando el mercado de aplicaciones para citas en línea; de entre más de 1.500 aplicaciones similares, Tinder va punteando con ingresos que se proyecta sobrepasen los $2.850 millones en 2022, según cifras de la encuestadora Statista.
De acuerdo con una publicación de El Universal, para usarla es preciso disponer de una cuenta de Facebook, y ser mayor de 18 años y, una vez habilitada la aplicación, se procede a configurar un perfil que consiste en una biografía de 500 caracteres y hasta seis imágenes del solicitante. También se puede vincular la cuenta de Tinder al Instagram e incluir información sobre trabajo, estudios y preferencias con respecto a quién se desea ver o no.
Debido a que el mundo cambió, luego de la pandemia, usar aplicaciones para citas ya no es mal visto como lo era hace una década; ahora hay infinidad de anécdotas e historias sobre parejas que han llegado al altar, luego de encontrarse por Tinder, así como muchas amistades que han surgido luego de interactuar a través de esta app.
Según un estudio de la Universidad de Stanford, Estados Unidos, que reúne datos de investigaciones y encuestas hasta 2017, alrededor del 39% de las parejas heterosexuales y el 65% del mismo sexo, se han conocido a través de aplicaciones de citas como Tinder o Badoo, las más antiguas.
Luego de que hace unos años atrás surgieron varias denuncias por casos de acoso y abuso sexual a través de esta red, la compañía comenzó a buscar medidas para mejorar la experiencia de sus usuarias femeninas, buscando hacerla más segura con sistemas capaces de reportar rápida y efectivamente cualquier problema causado por la conducta indebida de alguno de los miembros de la comunidad Tinder con los que puedan contactar.
De hecho, la empresa tecnológica Match Group, dueña de Tinder, se asoció con la organización No More (No Más), con el objetivo de combatir la violencia de género.
“Nuestro trabajo en materia de seguridad no termina nunca”, le explicó a BBC la primera mujer directora ejecutiva de Tinder, Renate Nyborg.
“Como cualquier mujer, puedo contar todas las experiencias que he tenido y que tal vez no quería tener: desde la forma en que te abordan, hasta la forma en que te tratan en el trabajo, pasando por la forma en que pueden suceder las cosas cuando estás saliendo activamente. Creo que todas las mujeres con las que hablo han tenido muchas experiencias de este tipo, y creo que la unión hace la fuerza”, comentó la ejecutiva a la cadena.
Sin embargo, desde la organización End Violence Against Women (Acabemos con la violencia contra las mujeres) calificaron las medidas tomadas por Tinder como un 'pequeño paso' para abordar la desproporcionada cantidad de abusos que sufren las mujeres en línea, describió la BBC en la publicación.
Tinder fue muy criticada por los abusos que sufren las mujeres a través de su servicio y además, preocupa que esta, así como otras aplicaciones similares, están siendo utilizadas por los depredadores sexuales.
No es para menos, la plataforma también fue escenario de un escándalo en 2019, cuando el estafador israelí Simon Levie engañó a muchas mujeres que conocía en esta famosa app de citas con el fin de robarles su dinero. Pese a que fue capturado y deportado a Israel, donde se pretendía que pasara un buen tiempo en prisión. Sin embargo, al cabo de cinco meses, fue liberado gracias a un programa que lo ayudaría a salir de la cárcel debido a la pandemia, donde cumplía todos los criterios.
Ante esto, el gigante del streaming, Netflix, estrenó este año el documental The Tinder Swindler (El estafador de Tinder), que narra la historia de tres mujeres que dicen haber sido engañadas por Leviev, a quien conocieron a través de la famosa aplicación de citas.
Durante una hora y cincuenta minutos, a través de las historias de la ciudadana noruega Cecilie Fjellhoy, la sueca Pernilla Sjoholmy la holandesa Ayleen Charlotte, se muestra cómo este hombre se mete en sus vidas después de conocerlas en Tinder y ellas terminan entregando sumas de dinero difíciles de confirmar, pero que algunos estiman en millones.
La historia está basada en el reportaje que hizo el diario noruego VG, publicado en febrero de 2019, que cuenta lo que sufrieron las tres mujeres que dan su testimonio en el documental.
En ese sentido, Tinder aconseja a las mujeres que usan su aplicación que estén atentas a todo tipo de indicio que evidencie como sospechoso a un usuario. Para lograrlo, ha implementado nuevas funciones capaces de llevar a cabo esta tarea, según publicó la cadena Radio Programas del Perú .
Pese a todos los desafíos, la búsqueda de pareja, en la actualidad, y con la tecnología a favor, se vuelve más real y hasta seria; de hecho, las redes sociales han acelerado esa gestión.