La nueva pesadilla de David Fincher

Hay películas que son para distenderse y otras que perturban, que no lo dejan a uno salir del cine con la mente despejada. En este segundo grupo está Perdida , la nueva película del genio de David Fincher, director de El club de la pelea , La red social y Seven , y que esta vez se dedica a retratar la pesadilla en la que se puede convertir vivir en pareja.

Perdida parece centrarse en aquella frase popular que asegura que nadie sabe realmente lo que sucede en el matrimonio del otro. Pero al mismo tiempo lleva esa premisa al interior de la pareja para asegurar que nadie sabe tampoco lo que sucede en su propio matrimonio.

Por eso, y a pesar de que ésta es una película tan perfecta como el resto de la filmografía de este director, hay que tener cuidado al momento de elegir con quién ir a verla. Gillian Flynn, la autora de la novela en la que se basa la historia y también la guionista del filme, aseguró que su propósito fue hacer que la película se convierta en la salida al cine que termina rompiendo parejas.

Aún así, Perdida se trata de algo más que de las miserias de las relaciones y la imposibilidad de conocer realmente a otra persona. Es también sobre el rol de los medios de comunicación en nuestra sociedad y sobre las secuelas que deja una crisis económica en la gente, ya que la decadencia del matrimonio sucede en paralelo a la crisis económica de Estados Unidos.

No es casual que la primera escena del filme sea la del personaje principal pensando en la posibilidad de abrirle el cráneo a su pareja para desenrollarle el cerebro y examinarlo cuidadosamente. ‘¿En qué estás pensando Amy?’, se pregunta Nick. Es una pregunta que de a poco tendrá su respuesta. ¿Realmente conocemos a la persona que tenemos al lado?

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