Campeón César Cielo espera hacer el mejor tiempo de su vida

El nadador brasileño César Cielo compareció este miércoles ante la prensa en el complejo de Crystal Palace, rodeado de compañeros y entrenadores, y señaló que espera hacer el mejor tiempo de su vida para repetir la medalla de oro que consiguió en Pekín 2008 en 50 metros libres.

"El récord del mundo o el noveno clasificado del año pasado están luchando por la misma medalla y ser favorito no cuenta para nada. Yo pienso en hacer el mejor tiempo de mi vida, independientemente de si es el mejor de la historia o de la competición", comentó Cielo, que vive sus primeros días en las lujosas instalaciones alquiladas por la delegación brasileña.

"Tengo que hacerlo lo mejor que pueda para estar en el podio. Tenemos que pensar que los rivales también disputarán la prueba de su vida y esta es una buena forma de empezar a pensar que nadie lo va a hacer mal", señaló el campeón del mundo en el Mundial de Roma-2009 en 50 metros libres y 100 metros libres.

"Quiero mejorar todo lo que he hecho hasta ahora. Voy a acudir a los 100 metros con mucha garra. No tiene sentido hacer menos esfuerzo, intentar guardar fuerzas o ahorrar energía", explicó Cielo sobre la posibilidad de que se reservara para la prueba corta.

Cielo, que dio la primera medalla de oro a Brasil en natación hace cuatro años, también comentó el avance de su país en esta disciplina.

"Hoy en día todo el mundo sabe que cuando tiene a un brasileño en una final está ahí para ganar, no sólo para participar. Brasil es respetado como equipo y eso es el resultado de muchas cosas", comentó Cielo, que mencionó la organización de los Juegos de 2016 y del Mundial de fútbol en 2014 como los dos grandes factores de la mejoría de su nación en deportes en los que antes no había tradición.

"Este equipo es nuevo, tenemos entre 20 y 25 años, pero tenemos muchas posibilidades de salir con más medallas que en Pekín", declaró el nadador de 25 años, 1,95 metros de altura y 88 kilos de peso.

Cielo, que detenta los récords mundiales de 50 y 100 metros libre, logrados cuando eran permitidos los bañadores de poliuretano, prohibidos en 2010, dio positivo en un control antidopaje en mayo de 2011.

El Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) no lo suspendió y le permitió competir en el Mundial de Shanghai-2011, aceptando su versión de que el positivo por furosemida, un diurético, fue producto de un complemento vitamínico.