El índice de Confianza del Consumidor Panameño (ICCP) se situó en 70 puntos en junio pasado, con una caída de 22 unidades respecto a enero de este año,...
- 30/06/2011 02:00
PANAMÁ. A pocas de horas de un compromiso internacional ante Ecuador, la selección sub-20 vive una profunda crisis luego del despido de Mario Méndez y el colombiano Richard Caicedo, asistentes del técnico Alfredo Poyatos.
Poyatos, quien había amenazado con renunciar en solidaridad con sus colaboradores, no se presentó al entrenamiento de ayer con la selección y la práctica fue dirigida por el preparador Julio César Toral y el preparador de porteros Donaldo González.
Mientras en la cancha del estadio Rommel Fernández el equipo nacional entrenaba sin su técnico, adentro del coliseo el presidente de la Federación Panameña de Fútbol (Fepafut), Pedro Chaluja, intentaba explicar los motivos por los cuales fueron separados Méndez y Caicedo.
Sin embargo, las explicaciones que dieron los federados dejaron más dudas que respuestas.
En un comunicado de la Fepafut, se informaba que Julio Toral y Donaldo González llegaban para reforzar el cuerpo técnico de la sub-20 y por eso se liberaba a Méndez y Caicedo.
Sin embargó, ayer en la rueda prensa el presidente de la Fepafut acusó a Méndez y Caicedo de ‘no cumplir’ con ciertas tareas como rendir informes técnicos y de falta experiencia y conducta profesional, pero al mismo tiempo señaló que no quería denigrar la imagen de ambos, porque son jóvenes.
Incluso dijo que durante la gira amistosa a Guatemala y Ecuador le faltó el respeto al delegado de Fepafut y a un federado ecuatoriano.
MÉNDEZ SE DEFIENDE
Mario Méndez salió al paso de esas acusaciones y dijo que todo eso es falso y que jamás cometió actos de in disciplina.
Méndez negó que haya pedido disculpas y aclaró que aún no había cobrado su cheque.
‘Ellos mienten. Yo no he cobrado mi cheque. Hablé con Poyatos y me dijo que iba a renunciar y que vamos hoy a buscar nuestros cheques’, mencionó.
A juicio del ‘cholito’, ellos querían sacarlo ahora que el trabajo estaba hecho y que la selección estaba clasificada al Mundial.
El técnico chiricano sostuvo que se va con la cabeza en alto por el trabajo realizado. ‘Estoy decepcionado y triste’, confesó Méndez.