Un paso al costado de Jeter, y otro hacia la inmortalidad

Derek Jeter selló con un imparable y una carrera empujada los 20 años de carrera con los Yanquis de Nueva York.

Ante sus archi enemigos, los Medias Rojas de Boston, Jeter le puso punto final a una muy grata estadía en el mejor béisbol del mundo, que absorbió la mitad de sus 40 años de edad.

El campo cortó terminó con un sólido promedio ofensivo de .310, 3 mil 465 imparables y un sitio seguro en el Salón de la Fama de las Ligas Mayores.

Jeter fue colocado como bateador designado en la alineación del encuentro de este domingo, siendo relevado en el tercer episodio, luego que su batazo permitiera la anotación de Ichiro Suzuki para que los Yanquis tomaran ventaja de 3-0.

Fue despedido con el ‘máximo respeto’, tal como rezaba el letrero que el dominicano David Ortiz, símbolo de los Medias Rojas, le entregara en presencia de los inmortales Carl Yastremski y Jim Rice.

Letreros como ‘gracias por los recuerdos’ y ‘el 2 inmortal’ se exhibieron inusualmente en Boston, donde los Yanquis jamás han sido bien recibidos... hasta el retiro de Jeter.

‘Ha sido una travesía de 20 años; les agradezco a ustedes (los fanáticos) por darme esta oportunidad’, dijo Jeter envuelto en la emoción de ver el término de una carrera magistral y llena de grandes momentos.