Puerto Rico celebró con pompa a su primer jugador en la MLB

Los seguidores del béisbol en Puerto Rico celebran que un día como hoy hace 75 años el lanzador Hiram Bithorn se convirtió en el primer pelotero puertorriqueño en jugar en las Grandes Ligas.

UN LANZADOR COMPETENTE

Hiram Bithorn dejó huellas en la pelota de las Grandes Ligas

victorias obtuvo Bithorn en una carrera interrumpida por su paso por el ejército estadounidense, por la Segunda Guerra Mundial.

años han pasado desde que Bithorn tomó un lugar con los Cachorros de Chicago en la temporada de 1942.

18-12

fue el mejor registro de una temporada para el puertorriqueño, completando 19 de los 30 partidos que inició en una campaña completa.

Y es que el 15 de abril de 1942 y jugando con los Cachorros de Chicago, Bithorn debutó en las Grandes Ligas, cuando entró en la séptima entrada a relevar al abridor Jake Mooty, en un encuentro ante los Cardenales de San Luis en el Estadio Sportsman's Park III de San Luis.

Bithorn, quien en aquel momento se convirtió en el pelotero 7 mil 312 en jugar en las Grandes Ligas, lanzó las últimas dos entradas del desafío, en las que enfrentó a siete bateadores y permitió un boleto, según destaca la página www.baseball-reference.com.

El partido lo ganó San Luis, 4-2, y el debut de Bithorn lo logró cinco años antes de que Jackie Robinson rompiera la barrera racial en el deporte, como el primer jugador negro en las Grandes Ligas.

Bithorn jugó nuevamente con los Cachorros en la temporada de 1942, en la que lanzó en 38 partidos, abriendo 16 de ellos, completando nueve y terminando con marca de 9-14.

El lanzador boricua volvió la próxima temporada de 1943 con los Cachorros y mejoró su récord a uno positivo con 18-12, completando 19 juegos de los 30 que inició.

En 1944 se alistó voluntariamente al Ejército de Estados Unidos para combatir en la II Guerra Mundial, con la que se mantuvo en combate hasta el 1945.

Tras finalizar el conflicto, Bithorn regresó en la temporada de 1946 a jugar con los Cachorros, con los que compiló una marca de 6-5.

El año después jugó con los Medias Blancas de Chicago, en la Liga Americana, convirtiéndose así en el primer puertorriqueño en jugar en ambas ligas. En 1947 fue el último año de Bithorn en las Grandes Ligas. Culminó con récord de 34 victorias y 31 derrotas. Bithorn murió a sus 35 años en 1951 en México, en condiciones que aún no han sido del todo esclarecidas.

En el invierno de ese año, según cuenta el entusiasta del béisbol Jorge Fidel López en su libro, ‘Sobre la vida de Hiram Gabriel Bithorn Sosa', Bithorn viajaba en coche desde los Estados Unidos. hacia México para participar como padrino de bautismo de su sobrino, David.

Debido al largo trayecto, Bithorn decidió detenerse en un hotel para descansar.

Según López, el 27 de diciembre de 1951 Bithorn y un policía mexicano identificado como Ambrosio Castillo Cano tuvieron una discusión y el agente hirió al deportista con dos disparos de bala. Dos días más tarde, Bithorn murió.

Su cuerpo yace en un nicho en el cementerio Buxeda en el sector turístico sanjuanero de Isla Verde.

En honor a su gesta deportiva, el estadio de béisbol más importante de la capital puertorriqueña de San Juan lleva su nombre.

‘Bithorn fue un gran lanzador en su momento. Para aquella época era un hombre grande, fuerte y de bola rápida, un gran atleta. Lamento que haya durado tan poco', dijo por su parte el historiador deportivo puertorriqueño Jorge Colón Delgado.

En Puerto Rico, Bithorn jugó durante diez temporadas y representó a los Yankees de Nueva York durante varios años pasando por las diversas divisiones de liga menor hasta que se incorporó al equipo Hollywood Stars, en la Liga del Pacífico.