La floración de los guayacanes se convierte cada año, entre los meses de marzo y abril, en un espectáculo visual que pinta de amarillo el horizonte de...
Actualizado
- 15/02/2019 01:00
Creado
- 15/02/2019 01:00
Pese a que le fue bien, prefiere no pasar por el tortuoso proceso
El arbitraje salarial en las Grandes Ligas data de los años 70, una de las fórmulas que se han establecido para que un pelotero acceda a un mejor salario o, por el contrario, que sus deseos económicos no sean aceptados.
Muchos peloteros han perdido en el proceso. Una importante mayoría acude con la esperanza de que por los números que consiguieron en la última temporada, les representen un ajuste en su salario por campaña; un grupo consigue el objetivo, y otro, sencillamente se va con menos de lo que esperaba.
En el caso del abridor de los Indios de Cleveland, Trevor Bauer, la victoria tuvo un sabor agridulce, pues aunque se impuso su pedido de $13 millones por sobre los $11 que le estaba ofreciendo el equipo, sin dudas los últimos momentos de la negociación resultaron los más tensos de su vida.
Bauer le ha ganado los dos procesos de arbitraje a los que se ha acogido con Cleveland; en ambas ocasiones, su sentimiento hacia el equipo no cambió, a pesar de que en las conversaciones, los representantes de Cleveland usaron ásperos términos para cuestionar su desempeño.
En 2017, acabó con marca de 17-9, y el año pasado, con 12-6, ambos números le valieron sendos aumentos salariales.
Se espera que Bauer vuelva al arbitraje el próximo año.
Lo Nuevo
