Federación dispuesta a negociar con peloteros

PANAMÁ. Los aires de huelga se han apaciguado un poco, pero el afán de los peloteros a ser mejores tratados no se ha esfumado.

Elpidio Pinto, presidente de la Asociación de Peloteros de Panamá, dijo ayer que están en los trámites para intentar el primer acercamiento con la federación.

Pinto en días anteriores señaló que están dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias (huelga), con tal de conseguir mejor trato para los artistas del espectáculo, los jugadores.

“Queremos que se nos suba los viáticos, según avancen los equipos, por mínimo cinco dólares por etapa, que los peloteros tengan un seguro colectivo, que se dé facilidades de hotel, para descansar, y que el pelotero sea dueño de su pase”, indicó el veterano tirador.

Luego de sus viaje por Puerto Rico, Franz Wever, presidente de la Federación Panameña de Béisbol (Fedebeis), informó ayer a La Estrella , que se enteró de la situación a través de los medios de comunicación. “Sólo sé lo que he leído”, indicó. Wever señala que como presidente de la Fedebeis, está dispuesto a conversar, pero ve difícil cumplir algunas de las peticiones de los jugadores. “Subir el viático es algo bastante difícil, pero se puede conversar a ver a qué acuerdo llegamos”.

El jerarca del béisbol también señaló que el tema del seguro colectivo es algo que ya existe y que no entiende por qué el tema sería motivo de discusión. “Los peloteros tienen su seguro colectivo, eso no es tema de discusión, por ahora”, dijo.

Dentro de la situación, Wever enfatiza que la mayoría de los peloteros cobran 14 dólares de viáticos, además cobran su sueldo, porque la gran parte de ellos son empleados públicos. “Ellos cobra su sueldo. La federación les gestiona a los empleados públicos una licencia con sueldo, así que ellos devengan sus salarios mientras están jugando”, sentencia.

Calazán Pérez, ex federado señala que para el año 2000 los peloteros cobraban 12 dólares de viático, pero la federación no tenía tantos ingresos como ahora. “En esos tiempos, no había televisión y se cobraba un dólar cincuenta centavos para entrar a ver los juegos”, dijo.