Una derrota que nadie pensaría: Spurs ante Knicks

Pudo más la inspiración de una noche iluminada en todo sentido para los Knicks de Nueva York, que el poderío de uno de los mejores equipos de la NBA.

Los Spurs de San Antonio perdieron 104-100 ante los Knicks de Nueva York, en una noche donde más allá de cualquier circunstancia, los grandes sucumbieron ante los más pequeños.

Y claro, el responsable de la debacle fue el entrenador; y Gregg Popovich asumió la posición de un entrenador sumamente dolido por lo sucedido.

‘Fue una actuación patética’, sentenció Popovich, un ganador de cinco campeonatos de liga, que sucumbió ante el peor equipo de Nueva York en todos los tiempos.

Perder ante un equipo malo es inconcebible para el estratega. Y ante uno que está en proceso de reconstrucción, menos.

Los Knicks ‘mejoraron’ su marca a 14-53, el registro más insignificante en la historia del club de Nueva York, que lucha por salir a flote a pesar de los pesares.

Popovich fue bastante claro dejando ver su enojo por una derrota que, si bien no le afecta pues su registro es de postemporada (41-25), sí hizo mella en dos cosas que para el técnico son grandes prioridades: ‘respeto al rival e integridad ante el juego’.

‘Langston Galloway encabezó a los anotadores con 22 puntos, Alexey Shved anotó cuatro de sus 21 puntos en el tiempo extra y Andrea Bargnani agregó 16 puntos y 10 rebotes para los Knicks’.

‘Ellos tuvieron más ganas de ganar que nosotros, nosotros sencillamente no la tuvimos nunca’, sentenció.