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- 12/06/2009 02:00
- 12/06/2009 02:00
PANAMÁ. Después de 14 años de espera, el voleibol ve concretado un sueño. El gimnasio exclusivo para esa disciplina, que tanto esperaban los amantes de este deporte, está a un paso de ser una realidad.
Ayer se terminó de colocar el piso del coliseo José A. Remón, para voleibol, ubicado en Avenida Cuba, a un costado de la piscina Adan Gordón, según informó Pandeportes.
El piso del gimnasio es de teraflex, un material que representa la excelencia en pavimentos deportivos y el cual es utilizado desde hace décadas, en el interior de estructuras de alto rendimiento.
Las nuevas especificaciones de este estadio, ponen a este deporte a la vanguardia de la disciplina, ya que el recinto reunirá todas los requisitos para albergar eventos de talla nacional e internacional.
Entre las cosas con que cuenta el coliseo están equipos de entrenamientos como: caminadoras, bicicletas, módulos de cuatro estaciones, soporte de discos y de mancuernas, set de platos olímpicos, barra olímpica y balanza para tallimetro.
Los trabajos de esta obra arrancaron en el año 1996, impulsados por el actual jerarca del voleibol nacional, Alberto “Beto” Remón. Pasaron muchas administraciones sin conseguir concretar la obra soñada por atletas y dirigentes de esta disciplina. “La administración del presidente Torrijos y de Ramón Cardoze apoyaron y pusieron manos a la esperada obra”, acotó.
Remón agregó que este sueño comenzó desde hace 14 años cuando sintió la inquietud de que cada deporte debía poseer su propio gimnasio, sumado a que no tenían un lugar apropiado para practicar, y por eso se emprendió la cruzada de tener casa propia donde acoger el voleibol.
Según el dirigente, el primer contacto que se hizo con el director del INDE en 1985 Jorge Estenoz, quien estuvo anuente pero no se concretó nada. Posteriormente se realizó un nuevo contacto con Víctor Danelo en 1986, donde tampoco se logró nada, manifestando que en lugar se construirían oficinas del Instituto Nacional de Deporte (INDE).
Posteriormente pasaron las administraciones del señor Ángel Jaén en 1988 y Paulino Romero hijo en 1989 y no se consiguió hacer el gimnasio.