LMB, el programa que marca la pauta

Hoy debo reconocer la labor de una entidad del boxeo que no es parte de ninguna de las organizaciones regentes del deporte mundial pero que ha marcado a un país por muchos años. Estamos lejos de su aniversario de enero, pero es buen momento pues otra vez hacen la diferencia y apuntan con su creatividad hacia la excelencia.

Tengo que reconocerles que entrando en mi tercera década de vida ya llevo en mi palmarés muchos lustros siendo fanático de Lo mejor del Boxeo y he visto mucha de su evolución. Hace probablemente una década el señor Juan Carlos Tapia era la única cara que veíamos detrás de toda una maquinaria talentosa que gracias a su profesionalismo siempre estuvo ahí, todas las semanas, todos los meses, por casi 35 años; quizás una conciencia remota que frecuentemente, entremezclada con bailes de tirinana y piernas de trapo, le ha pegado más de un halón de orejas a los que se descarrilan en este nuestro pequeño terruño.

A veces, cuando rechazamos un poco el cambio porque pensamos que éste distorsionaría lo que pensamos que, mejor, se daña, surgen nuevas figuras que inyectan juventud y dinamismo y que aseguran una mayor identificación con el programa. He tenido el gran honor de estar en sus instalaciones un par de veces y el aroma que fácilmente se puede respirar es de armonía y camaradería. Hago constar que no tengo ningún tipo de contrato con esta empresa, pues habrá más de uno que pensará que alabar algo bien hecho es sinónimo de lambonear, y que cuando vemos lo positivo es con un único fin de recibir algo a cambio. Hoy, mi participación sólo busca recordarles, a los que les encanta este deporte, que gozamos de tremendo privilegio al poder llamar a este programa, orgullosamente panameño.

Quién podría negar que los “reality shows” se han tomado las calles en los últimos años; estos programas se han ganado el entusiasmo de los televidentes pues muchos de ellos son tan bien estructurados y levantan tanta pasión que se hace imposible no estar pendiente de sus resultados. Lo Mejor del Boxeo armó un escenario propicio para que nuevos talentos salgan del anonimato y se conviertan en las próximas voces del boxeo en Panamá; como no debo ser imparcial mi voto se lo lleva, aunque le deseo la mejor de la suerte a todos, Suleimán y Alvarado, por ahora; su evolución hará que cambiemos de tolda de ser necesario.

Al señor Tapia lo han felicitado por una carrera de gran profesionalismo y de contribución a un deporte que llevamos en la sangre; sus logros son amplios, así que una felicitación de más no cae mal; si resaltamos siempre lo malo para mejorar, por qué no resaltar lo bueno para engalanar. Espero que él y su grupo de trabajo, encabezado en las figuras de Daniel Alonso y Oscar Ramos, sigan siendo parte de nuestra cultura por muchos años más. Es muy difícil imaginar mi fanatismo sin la complicidad de tan buen programa.

Una innovación continua les hizo voltearse hacia la creciente demanda en internet y han logrado colocar su página en sitiales inimaginables; es una parada fija y obligatoria de los que a diario consultamos sobre el boxeo panameño y mundial.

No había tenido la oportunidad de dedicar todas mis líneas a exaltar la buena labor de todo el engranaje que hace posible que usted y yo gocemos de un programa de gran calidad, cargado de profesionalismo y que muestra un constante mejoramiento de su forma y apariencia pero siempre basándose en lo que nosotros, como fanáticos, esperamos con gran exigencia. ¡Muchos éxitos y muchas felicidades!