‘El comercio es paz’

Los sueños de muy joven tentaron a Roberto Henríquez a pensar en dedicarse al canto. El tema de protesta “preludio de la destrucción” fue uno de los motivos de inspiración en esa etapa, pero otras razones y propósitos llevaron a este sociólogo a la actividad empresarial, en la que ha desarrollado una vida intensa y que lo catapultó al cargo de ministro de Comercio e Industrias.

Desde esta posición y sentado frente a su escritorio en el Ministerio de Comercio e Industrias, Henríquez hizo en entrevista con La Estrella una infidencia: que él mismo le pidió al presidente Ricardo Martinelli que le permitiera estar al frente de esta cartera, no obstante haber sido considerado para ser titular de otro ministerio, y porque considera que es en el Ministerio de Comercio e Industrias (MICI) en donde puede hacer el mayor aporte. Para Henríquez, aunque el trabajo es importante no puede constituirse en un objetivo en la vida, “porque la familia es primero”.

Fue en parte por la necesidad de apoyar a mi padre en su pequeña empresa y porque quería ganarme la vida. Ingresé a la Compañía Atlas, en 1972.

Ese fue el inicio de mi vida empresarial. Comencé como supervisor de ventas. Me fui ganando las posiciones, hasta llegar a desempeñarme como gerente general y socio.

Panamá tiene listas comerciales de intercambio con ambos países, ojalá podamos llevar esto en el futuro a tratados de libre comercio. Son dos países interesantes para Panamá.

La va a afectar, porque la medida que tomó Ecuador fue virtualmente decir que ninguna empresa ecuatoriana que tenga vínculos con sociedades panameñas, va a poder venderle al gobierno de Ecuador.

Además previamente había tomado otras medidas que afectaron el intercambio comercial con la Zona Libre de Colón (ZLC). Por supuesto nos preocupan las medidas que estén tomando en Ecuador.

Ya le pedí al jefe de negociaciones comerciales de este ministerio (Francisco Álvarez de Soto) que me presente lo antes posible todas las opciones que Panamá puede tener, incluyendo estudiar las que tenemos ante la Organización Mundial de Comercio (OMC). Vamos a buscar que las medidas sean a tono con las medidas que Ecuador está tomando y estamos pensando en llevar esto a un foro internacional.

No lo está porque aunque Panamá ha recibido el voto favorable de la OMC, en dos consultas y dos paneles que hemos elevado a ese nivel, la reacción de Colombia sigue siendo la de ganar tiempo y posponer la aceptación a ese fallo, que sería simplemente volver a la condición que teníamos antes de que Colombia hubiese adoptado estas medidas que coartan muchísimo las exportaciones desde la Zona Libre hacia ese país.

La ley existe, pero sigo pensando que es una opción última.

No descarto que Panamá la pueda utilizar cuando se justifique, pero en comercio primero se buscan otras opciones para tratar de solucionar los problemas.

El Ministerio de Comercio no es sólo el Tratado de Promoción Comercial (TPC) con Estados Unidos. El 99% de los periodistas que me entrevistan traen ese tema a colación. Para mí es prioritario estar siempre pendiente del ambiente interno del país. Que los inversionistas locales y extranjeros sientan que están trabajando bien. Que los exportadores se sientan respaldados por el ministerio.

Mi prioridad es que los sectores productivos nacionales que enlazan con el MICI lo vean como facilitador para potenciar al máximo las fuerzas productiva del país, para generar riqueza y empleos.

Le pedí a Francisco Álvarez de Soto que quiero una medición del efecto que han tenido los tratados. Porque la jefatura tiene dos direcciones generales, que son las de negociaciones y administración de los tratados. Le dije que quiero saber si los tratados con Singapur, con Taiwán y con los cinco países de Centroamérica, y con Chile, han producido realmente un incremento en el intercambio comercial entre los países. Ese es un balance importante que se debe hacer.

Mi jefe negociador acaba de volver de Estados Unidos, y me informa que hay muy buen ambiente en cuanto al tema en el Ejecutivo en Washington, y que hay mucho interés en pasar el Tratado.

Por un lado tenemos una negociación avanzada en un 98% con Canadá, y ya estamos generando las reuniones para ver si se puede ya cerrar ese tratado.

Vamos a mantener esfuerzos permanentes hasta lograr el TPC con Estados Unidos. También he pedido a la dirección de negociaciones que me reviva todo lo actuado con la Comunidad del Caribe (CARICOM), unión de 14 países con la que el sector exportador panameño quiere un TLC.

Otro propósito importante es tratar de montarnos en el tren de las negociaciones con la Unión Europea (UE), que Centroamérica tiene ya avanzadas.

Queremos explorar también la opción de negociar directamente con la UE.