BDA saca ventaja de la Ley No.49

PANAMÁ. Tras la nueva distribución del dinero del Fondo Especial de Compensación de Intereses (FECI) el Banco de Desarrollo Agropecuario (BDA) saldrá favorecido al contrario de lo que se pensaba.

Según la Ley No.49 de equiparación del 17 de septiembre de 2009, el 50% de este recurso ingresará al Tesoro Nacional para el pago de los préstamos hipotecarios preferenciales, el 25% al BDA cuando antes era el 50% y el 25% restante irá al FECI que administra la SBP.

Datos oficiales de la Superintendencia de Bancos de Panamá (SBP) revelan que en enero de este año el FECI recaudó 2.1 millones de dólares, de los cuales el BDA podría recibir 1.2 millones de dólares.

El FECI es un fondo que se obtiene a través del cobro de una sobretasa al 1% por cada préstamo personal o comercial mayor de $5,000 concedido por los bancos y entidades financieras, y se dirige a apoyar al sector agropecuario nacional a tráves del BDA.

José María Espino, gerente ejecutivo de Finanzas del BDA, aseguró que la entidad no será afectada con la reforma, ya que la misma amplió la cobertura de préstamos que antes no llegaban al FECI (los de las empresas que operan en las diversas zonas libres y especiales). A ello, hay que sumarle el convenio que mantiene activo el BDA con la SBP, en la cual reciben un aporte adicional de 75% del excedente luego de que la SBP haga su reserva del 25% que administra.

Además la entidad emprende una política agresiva de cobro para recuperar una morosidad de cuentas activas (préstamos vencidos y atrasados) que suman 28.3 millones de dólares.

En opinión, Ramón Barreiro, del Instituto de Estudios para una Sociedad Abierta (ISA), aseguró que si el país se encuentra en una bonanza económica quizás el descenso del FECI no afectará al BDA.

“Pero si el BDA no recibe ese fondo sería mucho mejor, ya que es básicamente un subsidio que historicámente no ha funcionado, pues el banco no solo otorga préstamos, además no recibe el pago de dichos créditos, que al final son condonados”, agregó.

Desde su creación en 1994, el FECI ha sido cuestionado por diversos sectores económicos, pues es considerado como una “carga adicional” en intereses al solicitar un préstamo.