Aranceles a autos y sus partes golpeará a la industria

Un reporte de la agencia Moody's señaló que el arancel del 25% impuesto a autos y partes de autos que entren a Estados Unidos impactaría negativamente la industria automotriz.

En su reporte, la calificadora de riesgo alerta de que la aplicación del nuevo gravamen afectaría a todos los segmentos de la industria automotriz en el mundo, no solo a la estadounidense, eslabones como fabricantes, proveedores de autopartes, distribuidores y compañías de transporte, entre otros.

GRAVAMEN

La medida tiene en alerta a las automotrices

mil millones se ha perjudicado en el comercio automotriz de Estados Unidos con la salida de Harley-Davidson de EE.UU..

Además de afectar la industria en cada punto donde se realice algún tipo de insumo para la fabricación de vehículos, en México las plantas establecidas saldrán muy afectadas, ya que los aranceles también impactarían directamente el producto interno bruto del país, donde (la industria automotriz representa el 2.9%.

El reporte de Moody's coincide con la acusación que hizo ayer el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en contra al fabricante prestigioso de motos Harley-Davidson de utilizar como ‘excusa' la imposición de aranceles por parte de la Unión Europea (UE) para sacar parte de su producción de suelo estadounidense.

La agencia de noticias Efe destacó en una información que tras conocerse la decisión de la empresa, desde su cuenta de Twitter Trump comentó: ‘sorprendido de que Harley-Davidson, de todas las compañías, fuera la primera en agitar la bandera blanca'.

El mandatario prosiguió escribiendo: ‘luché mucho por ellos y, en última instancia, no pagarán los aranceles a la UE, lo que nos ha perjudicado mucho en el comercio, hasta en $151 mil millones. Los impuestos son solo una excusa de Harley. ¡Sean pacientes!', indicó.

El fabricante de motos Harley-Davidson anunció ayer a través de un comunicado de prensa que planea trasladar parte de su producción fuera de Estados Unidos a raíz de los aranceles impuestos recientemente por la UE, una medida que Bruselas tomó para contrarrestar los gravámenes aplicados por Washington.