El Estado Generador

El Estado quiere volver a entrar en el mercado eléctrico como generador y no de forma pasiva. Eso pese a que hace poco tenía la intención de vender su participación en las empresas eléctricas con el argumento de que no debería ser juez y parte.

Con un discurso diferente, ahora estudia construir la hidroeléctrica Changuinola II y poner en marcha la térmica EGESA.

La inversión podría superar los $600 millones. A pesar de que el ministro de Economía y Finanzas señalara que se buscaría un socio que ponga el capital, el gerente de Egesa, Belisario Tejada, aseguró que nada es definitivo porque también se estudia que el proyecto sea financiado bajo el concepto llave en mano. La intención no es bien vista por algunos sectores que consideran que estos fondos podrían utilizarse en otras obras y dejar que la empresa privada se encargue del proyecto. Pastor Cabrera, exdirector de Política Energética y gerente de Termo Caribe, dice que la iniciativa preocupa. La experiencia del Estado inversionista y operador en el sector eléctrico ya se vivió con el IRHE, agrega. Entonces, solo se logró llevar energía eléctrica al 65% de la población panameña y había muchas deficiencias pese a la capacidad de sus técnicos. El tamaño de los proyectos daría al Estado un poder de mercado importante con la facultad de fijar precios, lo que podría ahuyentar a los inversionistas privados, alega. ‘Siempre es una competencia desleal, dada todas las prerrogativas que tiene el Estado frente a los agentes privados’, concluye.