Hoy festejan en medio de una polémica

BUENOS AIRES. Argentina celebra su bicentenario hoy en medio de una polémica tras el rechazo de la presidenta a compartir una ceremonia con el alcalde de Buenos Aires, un conflicto que refleja la crisis institucional que atraviesa el país.

“Si va con su marido, habrá que sentarse al lado, pero no me pone contento”, dijo Mauricio Macri, al invitar a la presidenta Cristina Kirchner a la gala de reapertura del Teatro Colón, la prestigiosa sala lírica inaugurada en 1908 como símbolo de la pujanza del país en su centenario.

Macri obtuvo una respuesta urticante: “Disfrute usted tranquilo y sin presencias molestas la velada del 24 de mayo”, le escribió Kirchner.

Macri, de derecha, es un acérrimo enemigo del ex presidente Néstor Kirchner, a quien acusa de estar detrás de su reciente encausamiento en una investigación por una red de espionaje telefónico.

Cristina Kirchner ha hecho saber que ningún ex presidente, a excepción de su marido, será invitado a la cena de gala en la sede gubernamental, a la que fueron invitados jefes de Estado extranjeros.

Incluso marginó al vicepresidente, Julio Cobos, distanciado de la jefa de Estado.

Estos enfrentamientos reflejan la crisis institucional en la que está inmerso el país.

“Llegamos a este año del bicentenario sin haber resuelto algunos problemas cruciales de carácter político institucional”, afirmó el historiador Natalio Botana.