Disidentes envían quejas al Papa

LA HABANA. Disidentes radicales enviaron una queja al Papa Benedicto XVI el viernes en la que desaprueban por ‘lamentable’ y ‘bochornosa’ la mediación de la Iglesia católica en la liberación de presos políticos.

La carta dirigida al Papa llevaba la firma de 165 nombres de opositores que residen dentro y fuera de Cuba, entre ellos Martha Beatriz Roque, Vladimiro Roca y Jorge Luis García.

En la misiva, entregada en la Nunciatura Apostólica en La Habana, los opositores radicales exigen ‘el cese’ de lo que consideran ‘apoyo político’ de los obispos al Gobierno.

LAS CRÍTICAS

Los disidentes critican la mediación de la Iglesia católica ante el Gobierno que permitió, con el apoyo de España y el Vaticano, la excarcelación de 52 reos que quedaban en prisión de los 75 disidentes condenados en 2003. Desde julio, 26 de ellos viajaron a España con sus familiares.

‘Respetamos las opiniones que pueda dar cualquier persona sobre la Iglesia católica. La nuestra es que, como mediadora, está haciendo todo lo que ha podido hacer por la libertad de nuestros hombres’, dijo a la AFP Berta Soler, una de las líderes de las Damas de Blanco, familiares de los 75 presos. ‘La Iglesia está haciendo lo que realmente debe hacer una Iglesia: estar al lado de las personas que sufren, de las personas que están presas y de lo está haciendo, el resultado ha sido positivo’, añadió.

Por su parte, el Arzobispado de La Habana, el cardenal Jaime Ortega, calificó de ‘ofensivo’ el contenido de esa carta y dijo que ha suscitado ‘indignación’ entre muchos fieles católicos.

Para los disidentes radicales, ‘una correcta mediación sobre el tema, hubiera implicado oír los reclamos de ambas partes y conciliarlos. Sin embargo, la solución del destierro (...) solo beneficia a la dictadura’, dice su carta.

El diálogo también provocó el cese de hostigamientos por parte de partidarios del Gobierno a las Damas de Blanco, y ha sido aplaudido por otros sectores de la disidencia, como el ex preso político Oscar Espinosa Chepe y bien acogido por la UE y otros países.

LA CARTA

La carta al Papa señala que las autoridades no permiten que Reina Luisa Tamayo, madre del preso político Orlando Zapata, muerto en febrero tras 85 días de huelga de hambre, concurra a misa junto a otros disidentes, sino sólo con su familia.

‘La jerarquía eclesiástica de esta provincia (Holguín, 760 km al este de La Habana) fue a visitarla para pedirle que hiciera precisamente lo que quiere el Gobierno’, dijeron los disidentes firmantes.

Sin embargo, Soler dijo que cuatro Damas de Blanco fueron recibidas el viernes por el cardenal Ortega, quien les aseguró que hará ‘todo lo que está en sus manos’ para que terminen esos hostigamientos contra Tamayo.