Campesinos huyen de sus hogares

COLOMBIA. Por lo menos 150 campesinos se han desplazado del municipio Santa Rosa de Osos porque temen por sus vidas. Este hecho se produce tras el asesinado de 10 campesinos que fueron masacrados presuntamente por narcoparamilitares.

A las ocho de la mañana hora local, los cadáveres de las 10 personas asesinadas (nueve hombres y una mujer) recibieron sepelio. Fueron llevados a la Catedral de Santa Rosa de Osos, donde los esperaba para el último adiós y la celebración religiosa el obispo de la localidad, monseñor Jorge Alberto Ossa.

El homicidio colectivo ocurrió el miércoles en una finca del municipio, departamento de Antioquia, a unos 275 kilómetros al noroeste de Bogotá.

‘Nunca en el pueblo habíamos visto una (masacre) como ésta’, aseguró William Alvarez, un campesino de 56 años que se dedica a la recolección de café.

Hasta el momento las autoridades creen que los responsables son paramilitares y que el motivo pudo haber sido que el dueño de la finca no les pagó a los narcoparamilitares una extorsión.

Fue la primera vez en mucho tiempo que en Colombia se registra una masacre de esta envergadura y con tan alto número de víctimas. Una matanza similar fue perpetrada en agosto de 2009 en el puerto de Tumaco, departamento de Nariño, cuando hombres armados dieron muerte a 12 indígenas.

Ya hay una recompensa de 27.500 dólares a quienes entreguen información que permita dar con el paradero de los autores. También el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, tiene previsto llegar en la jornada a Santa Rosa de Osos para encabezar un consejo de seguridad.