Chinchilla lamenta encuestas a boca de urna en elecciones paraguayas

La jefa de la misión de observación de la Organización de Estados Americanos (OEA), la expresidenta costarricense Laura Chinchilla, dijo hoy que el proceso electoral en Paraguay transcurre con normalidad, pero mostró su disconformidad con las encuestas a boca de urna porque "confunden al electorado".

Más de cuatro millones de paraguayos están llamados hoy para elegir a su nuevo presidente y vicepresidente, Congreso y autoridades gubernamentales.

"El proceso ha sido un proceso bastante tranquilo (..) La organización está bien, algunas de las preocupaciones que teníamos al principio como la integración de las mesas electorales, pero se ha pasado la prueba", dijo Chinchilla a los periodistas en Asunción.

Subrayó que la OEA ha recomendado dejar de lado las encuestas a boca de urna, como las que algunos medios están divulgando durante estos comicios en Paraguay.

"Queremos subrayar algo que ya hemos recomendado en otros informes y que en esta ocasión desafortunadamente no se pudo sostener que es la importancia de dejar atrás la realización de las encuestas a boca de urna. Es una herramienta que a veces confunde al electorado", dijo.

Chinchilla explicó que uno de los objetivos de su misión es observar si se han dado avances en cuanto a la transparencia del financiamiento de los partidos políticos y de la campaña electoral, aunque destacó que Paraguay tiene una normativa al respecto.

"Hay que reconocer que para esta elección hay nueva normativa que se está aplicando, vamos a observar si las autoridades están con los instrumentos necesarios para hacer valer esa normativa y si es necesario fortalecerla con algunas medidas adicionales", declaró.

Los dos candidatos con más posibilidades de obtener la Presidencia son Mario Abdo Benítez, del conservador y gobernante Partido Colorado, y Efraín Alegre por la opositora alianza Ganar, integrada por el Partido Liberal y la concertación de izquierda Frente Guasu.

Además de Abdo Benítez y Alegre, otros ocho candidatos compiten por la Presidencia, pero sin opciones de alcanzarla, de acuerdo con las encuestas, en un país donde no hay segunda vuelta electoral.

Los resultados de esas candidaturas se conocerán de madrugada en Paraguay, mientras los relativos al Congreso se darán hasta dentro de una semana.