Santos busca frenar la crisis en Bogotá

El presidente Juan Manuel Santos anunció ayer un plan para tratar de superar la crisis que sufre Bogotá desde que su anterior alcalde, Gustavo Petro, fuera destituido por faltas administrativas graves al cambiar por decreto a finales del 2012 el sistema de recolección de basura de la ciudad.

Durante una intervención desde la sede de gobierno en compañía del alcalde encargado y también ministro de Trabajo, Rafael Pardo, Santos anunció distintas medidas.

El mandatario, que está en campaña para ser reelecto como presidente de Colombia en los comicios del 25 de mayo, dio la orden de agregar 300 policías al sistema masivo de transporte de Bogotá llamado Transmilenio.

En la capital, con unos ocho millones de habitantes, la congestión del tráfico es uno de los mayores dolores de cabeza para los bogotanos. Por ello, el presidente anunció un desembolso de 1 billón de pesos (unos 550 millones de dólares) para obras en el Transmilenio y para reactivar un plan para construir 10,000 viviendas para las clases más pobres en la localidad de Usme, al sur capitalino.

Además, Santos informó que habrá un control especial de las autoridades en 75 barrios considerados los más inseguros de la capital.

Igualmente, el presidente señaló que se hará un control en 53 zonas escolares donde hay presencia de vendedores de drogas.

Los anuncios del mandatario, quien no quiso responder preguntas, fueron criticados por otros candidatos a la presidencia, como la exministra de Defensa Marta Lucía Ramírez, del Partido Conservador; y Clara López, del izquierdista partido Polo Democrático Alternativo, por considerar que utiliza su condición de presidente para sacar provechos electorales en Bogotá, que con más de cinco millones de votantes es el principal colegio electoral del país.